Una residente de Toronto estuvo en campo de concentración nazi de niña
La canadiense Miriam Ziegler regresó a un lugar que ella prometió que nunca lo haría. Volver a Polonia. Volver a Auschwitz.
Ella regresó por una foto, una imagen tomada hace 70 años, cuando Auschwitz, el campo de exterminio de la Segunda Guerra Mundial de los nazis fue liberado por el Ejército Rojo soviético.
EscucheDurante décadas, ella no supo de la existencia de la imagen.
Esta es la imagen. La chica que muestra su número de prisionera tatuado es Miriam, de nueve años.
«Estaba emocionada. Emocionada porque éramos libres, no hubo más experimentos, no más alemanes que nos mataran, y eso era motivo para ser feliz», dijo recientemente.
Compartida en todo el mundo
La imagen de los 13 niños fue difundida en todo el mundo, una imagen fija obtenida de los rollos de película tomadas por el Ejército Rojo en Auschwitz y en los campos de exterminio conectados que fueron liberados en 1945. Esas fotos se encuentran en los registros oficiales y libros.
A Auschwitz se le ha llamado el más diabólico de todos los campos de concentración creados durante la Segunda Guerra Mundial. De acuerdo con el Congreso Judío Mundial, se estima que 1,1 millones de personas, la mayoría de ellos judíos, fueron asesinadas en Auschwitz entre 1941 y 1945. El término Auschwitz se utiliza para describir varios campos conectados, incluyendo Auschwitz-Birkenau, donde estuvo Ziegler.
Ziegler no sabía nada de la imagen. Ella emigró a Canadá, se casó y tuvo hijos. Ninguno se dio cuenta de que era parte de la historia fotográfica del Holocausto.
El tatuaje es aún visible en su brazo izquierdo. Recientemente, en su casa en Toronto, Ziegler espontáneamente subió la manga izquierda para demostrarlo y recitar los números oficiales que los nazis le habían dado cuando fue enviada primero a Auschwitz-Birkenau en el verano de 1944.
«Me llamaron por números,» dijo con tristeza. Ella era la presa número A16891.
Una renuencia inicial
Ziegler descubrió la fotografía en 1981, cuando visitaba un museo en Israel. Hay otra foto de ella, sorprendida, justo después de ese descubrimiento.
«Yo no lo podía creer», dijo. «De que hubiera una imagen de lo que pasó. Allí estaba la prueba. Me quedé muy sorprendida.»
La historia fue publicada en los titulares de aquel momento. Ante el 70 aniversario de la liberación de Auschwitz, grupos judíos le pidieron regresar al campo para una reunión con supervivientes de esa imagen. Cinco fueron capaces de hacer el viaje y posar una vez más para una cámara.
Al principio, Ziegler no quería ir.
Ella trató de visitar Auschwitz en la década de 1980, pero se sintió tan mal que interrumpió su visita y se fue, diciendo que nunca regresaría.
«Va a ser muy difícil»
Pero sabiendo que probablemente sería el último aniversario al que muchos sobrevivientes de Auschwitz serían capaces de asistir, ella accedió a hacer el viaje.
Va a ser muy difícil «, dijo.
«Tengo que contar mi historia. Y tengo que ir allí y contar el infierno que viví hasta llegar aquí. Tengo 70 años y todavía estoy viva. Y la gente tiene que saber la verdadera historia.»
Su hija, Adrienne Shulman, la acompaña, lo que es profundamente importante para Ziegler.
«Quiero que mi hija vea, y diga:» Aquí estamos las dos, después de vivir a través de todo ese infierno. ‘»
Ziegler se ha mantenido en contacto con dos de los sobrevivientes, quienes viven en los Estados Unidos. Con uno habla por teléfono casi todas las semanas. Pero ahora quiere ver a los otros también.
Pero sobre todo, quiere asegurarse de que la imagen y los horrores no se olviden.
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