Decenas de personas perdieron la vida en bombardeos aéreos que se llevaron a cabo en las últimas horas en Alep, norte de Siria, en particular cuando un hospital apoyado por Médicos Sin Fronteras, MSF, fue bombardeado.
Por lo menos 6 empleados del hospital, entre los cuales se encuentra el último pediatra de la región, y tres niños murieron cuando el hospital de campaña bien conocido al-Quds, fue atacado un poco antes de la medianoche en el barrio rebelde de Sukkari, afirman militantes y socorristas.
Varios edificios fueron prácticamente destruidos y un edificio residencial se habría derrumbado. El balance de este ataque es de 27 muertos por el momento, pero un grupo humanitario local afirma que varias víctimas continúan prisioneras bajo los escombros.
MSF dice en un correo electrónico que transmitido a la agencia Associated Press, que 14 pacientes y empleados se encuentran entre las víctimas y advirtió que el número de víctimas puede aumentar.
Según la agencia de prensa oficial SANA, pocas horas después hubo nuevo bombardeos que dejaron por lo menos 14 muertos y 10 heridos en Alep.
El Comité Internacional de la Cruz Roja, previene por su parte que Alep está al borde de una catástrofe humanitaria. Una portavoz de la organización dijo que el ataque contra el hospital de al-Quds es inaceptable, pero que desafortunadamente no es la primera vez que los servicios médicos son atacados. La Cruz Roja agrega que las reservas de alimentos y de medicamentos están casi agotadas y que no se podrán renovar debido a la intensificación de la violencia.
El cese el fuego que entró en vigencia en Siria el 27 de febrero pasado parece ser completamente inexistente en los últimos días.
Associated Press
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.