El presidente filipino Rodrigo Duterte

El presidente filipino Rodrigo Duterte
Photo Credit: TED ALJIBE

Presidente filipino quiere exterminar a millones de drogadictos

Rodrigo Duterte, presidente de Filipinas, se comparó a Hitler y afirma “que estaría feliz” de exterminar a millones de drogadictos y traficantes de drogas en su país.

Sus comentarios provocaron la conmoción y el enojo entre los grupos judíos de Estados Unidos, que se suman a la presión ejercida sobre el gobierno de Estados Unidos para que adopte una línea más dura contra el líder filipino.

El rabino Abraham Cooper, director del Centro Simon Wiesenthal de Terrorismo Digital y Proyecto de Odio, dijo que estas declaraciones eran “intolerables” y que Duterte les debe disculpas a las víctimas del Holocausto por su retórica repugnante.

La Liga Anti-Difamación, un grupo internacional judío basado en Estados Unidos, dijo que los comentarios de Duterte eran “ofensivos y sin ningún sentido”. ”La comparación de drogadictos y traficantes de drogas con las víctimas de Holocausto es inapropiada y profundamente ofensiva”, dijo Todd Gutnik, director de comunicaciones del grupo.

Recordemos que recientemente Rodrigo Duterte insultó al presidente Barack Obama y que con una serie de controvertidas declaraciones ha socavado la estrecha relación que existía antes entre Manila y Washington. Y en su lucha contra la droga, ha sido mordaz, no solo contra Estados Unidos sino contra Naciones Unidas y la Unión Europea también.

El presidente filipino Rodrigo Duterte, durante un discurso ante altos mandos militares el primero de julio 2016
El presidente filipino Rodrigo Duterte, durante un discurso ante altos mandos militares el primero de julio 2016 © Reuters/Erik de Castro

En un discurso incoherente a su llegada a la ciudad de Davao después de una visita a Vietnam, Duterte dijo a la prensa que él ha sido descrito por sus adversarios “como un primo de Hitler”.

Afirmando que Hitler había eliminado a millones de judíos, el presidente Duterte dijo que “hay millones de drogadictos en Filipinas y estaría feliz de masacrarlos”. “Si Alemania tuvo a Hitler, Filipinas tendrá…”, dijo haciendo una pausa sin terminar su frase y se señaló a sí mismo.

“Ustedes conocen mis víctimas. Y me gustaría que fueran todos criminales para terminar con el problema en mi país y salvar la próxima generación de la perdición”, continuó diciendo el presidente filipino en su discurso.

El ex alcalde de la ciudad de Davao fue elegido como presidente de Filipinas el mes de mayo pasado, prometiendo emplear la “mano dura” contra los traficantes de drogas y los drogadictos en ese país de 100 millones de habitantes.

Su campaña contra el tráfico de drogas ha dejado ya un saldo de más de 3.000 muertos desde que fue juramentado el 30 de junio pasado.

RCI/Radio Canadá/Reuters

Categorías: Internacional, Política
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