El general John Nicholson, jefe de las fuerzas estadounidenses e internacionales en Afganistán, declaró este lunes que «no refutaba» informes de que Rusia estaría proporcionando apoyo a los talibanes, incluyendo armas.
El militar estadounidense hizo estas declaraciones en Kabul durante una visita del secretario de Defensa de Estados Unidos, Jim Mattis.
Interrogado sobre reportes de que Rusia estaría proporcionando ayuda a los talibanes, que controlan grandes áreas de Afganistán, Nicholson respondió: «No estoy refutando eso».
Un funcionario militar estadounidense de alto rango, que habló bajo condición de anonimato, dijo que labores de inteligencia mostraban que Rusia estaba proporcionando apoyo monetario y armas a los talibanes, específicamente ametralladoras.
Rusia ha negado categóricamente suministrar cualquier ayuda material o financiera al grupo insurgente, pero dijo que mantiene lazos con autoridades de los talibanes para impulsar negociaciones de paz.
Zamir Kabulov, enviado especial de Rusia para Afganistán, dijo en una entrevista el 30 de marzo que las acusaciones de colaboración entre Rusia y los talibanes eran una invención del gobierno afgano y sus aliados, incluyendo Estados Unidos, para «justificar su propio fracaso en el campo de batalla».
En su origen, Estados Unidos armó y apoyó a los talibanes como parte de su política contra la Unión Soviética en Afganistán, en el marco de la Guerra Fría.
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