Los usuarios de Android que eligen desactivar los servicios de localización aún envían su posición a Google sin su conocimiento, descubrió un medio especializado estadounidense.
Muchas personas eligen desactivar los servicios de ubicación de sus teléfonos inteligentes para evitar ser rastreados. Pero según la investigación de Quartz, ni la desactivación de estos servicios, ni la abstención de utilización de aplicaciones, ni la omisión de insertar una tarjeta SIM en su teléfono, impiden que Google tenga acceso a su posición geográfica.
Según los informes del media estadounidense, un teléfono pirateado daría la posición aproximada de una persona en un radio de hasta 400 metros. En un área urbanizada, la precisión de la ubicación sería mucho mayor, dada la proximidad de las torres de transmisión.
El culpable es el sistema de notificación y mensajería de Google, que ha estado recopilando direcciones de transmisiones celulares vecinas durante 11 meses para personalizar las informaciones enviadas.
Contactado por Quartz, Google afirma que esta información nunca se almacenó en sus servidores y se borran después de su recepción.
La compañía dijo que pondrá fin a esta recolección de datos no autorizados a fines de noviembre.
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Radio-Canadá/Quartz/ Engadget/ Techcrunch
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