El presidente Donald Trump despidió a Rex Tillerson como Secretario de Estado y anunció mediante Twitter el nombramiento de Mike Pompeo como reemplazante.
“Mike Pompeo, director de la CIA, será nuestro nuevo Secretario de Estado”, dijo Trump mediante un mensaje difundido en la red social y, apelando a una de sus frases preferidas, agregó que hará “un trabajo fantástico”.
Tras agradecer a Tillerson por los servicios brindados, el mandatario anunció que colocará a Gina Haspel como nueva directora de la Agencia Central de Inteligencia, quien se convertirá en la primera mujer nombrada en el cargo.
Mike Pompeo era hasta ahora titular de la CIA. REUTERS/Leah Millis.
Un oficial de la Casa Blanca se refirió a los cambios diciendo que Trump quería tener un nuevo equipo funcionando, en vistas de las futuras conversaciones con Corea del Norte, así como para llevar a cabo las numerosas negociaciones en materia comercial.
El funcionario se expresó bajo anonimato, ya que no está autorizado a expresarse públicamente sobre los temas abordados.
Desde hacía ya algún tiempo se venían escuchando rumores respecto a fricciones entre Tillerson y el titular de la Casa Blanca.
Con anterioridad, el ahora ex Secretario de Estado cumplió funciones como ejecutivo de la petrolera Exxon Mobile Corp.
La llegada de Tillerson, en febrero de 2017, cuando las relaciones con su ex jefe eran mejores. REUTERS/Carlos Barria.
En octubre último, los medios de comunicación estadounidenses informaron que Tillerson había calificado a Trump de “idiota”, algo que ex funcionario nunca negó.
El ex mano derecha del presidente siguió insistiendo en que la relación entre ambos era sólida y que estaba exenta de la tirantez de la que hablaban los rumores.
Pocas horas después de retornar de un viaje por África, Tillerson se enteró de su remoción del cargo, aunque el mandatario no ofreció ninguna explicación sobre el cambio de funcionarios.
Tillerson había previsto retirarse de Exxon en marzo de 2017, a la edad de 65 años, bajo las normas impuestas por la política de jubilaciones de la empresa, por lo que recibió un pago de 27,3 millones de dólares el año último. También es poseedor de acciones en la petrolera por valor de varios millones de dólares.
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