Un balance provisorio de dos muertos es el saldo provisorio de una balacera ocurrida en un local comercial en el sur de Francia.
Un hombre que sostuvo actuar en nombre del a organización terrorista Estado Islámico tomó rehenes en un supermercado del sur de Francia, pocos minutos después que un policía fue herido de bala en una localidad cercana.
Hasta el momento, las pesquisas no han podido establecer si existe algún vínculo entre ambos eventos.
La justicia antiterrorista se abocó de inmediato a la investigación del hecho, que fue calificado por el primer ministro Edouard Philippe como “grave”.
La toma de rehenes comenzó alrededor de las 11, hora local, en un supermercado de la ciudad de Trebes, cerca de Carcassonne, en el departamento de Aude.
Las autoridades policiales dijeron que el captor disparó en varias ocasiones, aunque en un primer momento no pudieron aclarar si las balas impactaron en alguna persona.
El primer ministro resaltó la gravedad del hecho. PhilippeREUTERS/Charles Platiau.
Según un testigo, el agresor ingresó al local comercial al tiempo que gritaba “Allah Akbar”, que significa “dios es grande”, según se pudo saber a través de una fuente ligada a la investigación del ataque.
La gendarmería, no obstante, sostuvo que al menos una o dos personas habían resultado heridas como consecuencia de la balacera.
Poco antes, un agente de policía había sido herido por un hombre que luego se dio a la fuga. El ataque tuvo lugar en Carcassonne, también en el departamento de Aude, a menos de dos kilómetros de Trebes.
Hasta el momento, ningún nexo ha sido establecido de manera formal entre ambas acciones.
La prefectura local anunció en su cuenta de Twitter que el sector de Treves “se halla clausurado” y pidió a la población que “facilite el acceso de las fuerzas del orden”.
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