La Conferencia Episcopal de Nicaragua, CEN, presentó al presidente nicaragüense Daniel Ortega una proposición para democratizar el país y esperan una respuesta “lo más pronto posible” para encontrar una salida a la crisis en la que se encuentra hundido el país centroamericano, que ha dejado hasta el momento por lo menos 134 muertos durante las manifestaciones.
El presidente Daniel Ortega por su parte, pidió a los obispos dos días para reflexionar sobre su propuesta de democratización. “Él nos ha pedido simplemente que le demos un par de días de reflexión y él nos va a dar una respuesta”, dijo monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua y miembro de la comisión mediadora de la CEN en el diálogo.
El obispo Báez explicó que al presidente Ortega se le presentó prácticamente la misma agenda que se ha venido planteando en el proceso de diálogo nacional, que fue suspendido por los mismos obispos mediadores ante la creciente violencia gubernamental contra la sociedad civil.
La CEN -que se había propuesto como mediadora desde el mes de mayo, tratando de sentar en la misma mesa al gobierno y la oposición formada por representantes estudiantiles, de las empresas y de la sociedad civil- decidió suspender el diálogo después de la muerte de 16 manifestantes el 30 de mayo. Y al día siguiente declaró que no reanudaría su papel de mediadora mientras continuara la represión.
El cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua y presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, acompañado por todos los obispos, informó que han entregado al mandatario la propuesta consensuada sobre la democratización y se han declarado a la espera lo más pronto posible de su respuesta por escrito, de lo que dependerá si se reanuda o no el diálogo.
El cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua y presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua leyendo el comunicado de la CEN en Managua, Nicaragua, el 7 de junio 2018. (REUTERS/Oswaldo Rivas)
Monseñor Rolando Álvarez, portavoz de los obispos mediadores en el diálogo expresó que la continuación del proceso del diálogo dependerá de la respuesta de Ortega, quien tendrá que responder el sábado a la propuesta de la CEN.
El encuentro se desarrolló “en un ambiente de serenidad, franqueza y sinceridad”, dice el comunicado de los obispos nicaragüenses. “Le hemos entregado la propuesta que recoge los sentimientos de muchos sectores de la sociedad nicaragüense y expresa el anhelo de la mayoría de la población y esperamos la respuesta lo más pronto posible”, leyó en Cardenal Brenes.
Manifestantes bloquean la autopista Panamericana en Ticuantepe, Nicaragua, el jueves 7 de junio 2018. (REUTERS/Oswaldo Rivas)
Esta ola de protestas sin precedentes contra el héroe de la revolución sandinista, que derrocó la dictadura en 1979, fue provocada por la revocación de una resolución sobre la seguridad social que se transformó rápidamente en un movimiento general de rechazo contra Daniel Ortega.
A la cabeza del país desde 2007, después de haber liderado el país entre 1979 y 1990, Daniel Ortega está acusado de reprimir las libertades y confiscar el poder. Por su parte, el presidente nicaragüense denuncia “una conspiración de la oposición” para derrocarlo.
RCI/AFP/elnuevodiario.com/laprensa.com
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