El consumo de alcohol y drogras se encuentra en el centro de las preocupaciones. Foto: iSock.

Alcohol, drogas y texto al volante: buscan bajar cifra de accidentes

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Un aparente aumento del número de accidentes de tránsito, provocados por el consumo de sustancias tóximas o el uso de aparatos electrónicos mientras se maneja un automóvil preocupa a las autoridades en Canadá,..

Dos cuerpos policiales de la provincia de Ontario, en el centro-este canadiense, anunciaron que harán públicos los nombres de los automovilistas hallados en infracción, por conducir sus vehículos con las facultades mentales afectadas por consumo de sustancias tóxicas.

Las policías de York y de South Simcoe, que se encuentran a pocos kilómetros al norte de Toronto, dijeron que la medida fue impulsada por la constatación del aumento, rápido y constante, de casos de conductores con sus capacidades afectadas por consumo de diversas sustancias.

Según los responsables, hasta el momento las campañas de prevención no han demostrado ser efectivas a la hora de buscar cambiar el comportamiento de los automovilistas, por lo que decidieron modificar sus prácticas habituales y a partir de ahora identificarán públicamente a los infractores.

Durante el invierno, el consumo de productos tóxicos multiplica el riesgo de accidentes. Foto: 2009 Dmitry Kalinovsky.

En su mayoría se trata de personas susceptibles de ser multadas por colocarse al comando de un vehículo tras la ingesta de alcohol o drogas.

La policía de South Simcoe dijo que por el momento sólo se contempla que la medida sea transitoria. La aplicación de la misma se extenderá sólo durante el mes de diciembre, tras lo cual se espera que se lleve a cabo una evaluación de la experiencia.

Por el contrario, el departamento policial regional de York sostuvo que la nueva práctica fue puesta en vigencia indefinidamente.

“Estamos intentando toda opción a nuestro alcance, porque no hemos visto las cifras descender” sostuvo la condestable Laura Nicolle, de la policía de York, en diálogo con la agencia The Canadian Press, al referirse al número de personas que desobedecen las normas que prohíben conducir un vehículo tras la ingesta de productos tóxicos.

Según la funcionaria, en lo que va de 2018 su departamento labró más de 1.400 multas a conductores que se hallaban bajo los efectos de alcohol o drogas, con 27 de esos casos registrados sólo en la última semana.

Aunque no fue incluido en este caso, el uso de teléfonos al volante es una de las principales causas de accidentes de tránsito. Foto: iStock.

En el caso de South Simcoe, la fuerza local dijo que tiene documentación suficiente para demostrar que los casos de manejo con las facultades mentales alteradas vienen aumentando desde 2016. Ese año el departamento labró 26 infracciones, mientras que en 2017 el número subió a 35. En 2018, hasta el momento, se practicaron 96 arrestos por ese tipo de delito.

Las autoridades en York tienen previsto mantener el nombre de los infractores en una lista que se hallará a disposición del público en Internet por un plazo no inferior a los 30 días.

No se trata de la primera experiencia en este tipo. El servicio regional de policía de Niágara, también en Ontario, aplica la práctica desde hace 5 años, aunque no suministró cifras que permitan evaluar los resultados en su caso.

Controles resistidos

Por su parte, la intención del gobierno federal canadiense para permitir a la policía que pueda imponer el test de alcoholemia a los conductores genera controversia.

La inclusión de disposiciones en el código criminal, para luchar contra un aparente aumento del consumo de alcohol al volante, fue denunciado por diversas organizaciones de defensa de los derechos de las personas. La entidades sostienen que dichas medidas violentan los derechos individuales, al tiempo que abre la puerta a la comisión de abusos por parte de las fuerzas de seguridad, que podrían decidir someter a los automovilistas a dicha prueba según su propia discrecionalidad.

Hasta el momento, la policía sólo podía exigir el test de alcoholemia a aquellos conductores que presenten signos claros como para presuponer que podrían haber consumido alcohol fuera de los límites aceptados, que en la mayoría de los casos es cercano a una copa por persona.

La ministra federal de Justicia defendió la obligatoriedad de los controles.. THE CANADIAN PRESS/Adrian Wyld

Es cierto que no es infrecuente ver botellas de bebidas alcohólicas vacías arrojadas a la vera de rutas, o en lugares solitarios o poco transitados en las ciudades donde, por lo general, jóvenes y no tan jóvenes se detienen a ingerir alcohol, a veces bajo la forma de cócteles, antes de dirigirse a una fiesta o a bailar al comando de un auto.

Con la despenalización del consumo recreativo de la marihuana, también han aparecido los temores de que algunas personas decidan manejar luego de haber fumado la misma.

El gobierno federal intentó minimizar los temores de prácticas discriminatorias o violación de los derechos individuales por la entrada en vigencia del test de alcoholemia obligatorio.

La ministra federal de Justicia, Jody Wilson-Raybould, reconoció que puede producirse una serie de presentaciones judiciales que busquen detener la puesta en práctica de las nuevas disposiciones, pero al mismo tiempo defendió las mismas, asegurando que respetan en forma plena las disposiciones de la Carta de Derechos y Libertades, considerada por los canadienses como uno de los instrumentos legales más importantes en el país.

El análisis obligatorio para detección de consumo de alcohol en automovilistas entrará en vigencia el 18 de diciembre.

Un nuevo “flagelo”

En los últimos meses, las autoridades canadienses, tanto a nivel federal, provincial y municipal han puesto el centro de su atención en reglamentar el uso de los teléfonos móviles por parte de los automovilistas.

Si tomamos el caso específico de Quebec, el uso del teléfono celular al volante está prohibido en toda la provincia desde 2008. Sin embargo, los responsables constataron en el pasado reciente un aumento importante de infracciones al respecto, que pasaron de 42.000 a 66.000 entre 2009 y 2013.

En la página web de la Sociedad del Seguro Automotor de Quebec, SAAQ por sus siglas en francés, “el simple hecho de tener en mano o de todo otro modo mientras se conduce” un teléfono móvil está prohibido

A pesar de las campañas de prevención, muchas personas siguen usando sus teléfoos mientras manejan. Foto: iStock.

Los dispositivos incluidos por las normas, según las SAAQ son: los teléfonos celulares clásicos, que no se conectan a Internet; los teléfonos inteligentes; todo aparato que muestre los correos electrónicos y permita navegar por Internet, como las tabletas y los relojes inteligentes; los aparatos tipo iPod, las pantallas (con excepción de los sistemas de geolocalización satelital, conocidos como gps).

El uso de dispositivos que utilizan manos libres no se encuentra vedado, pero sí es desaconsejado, ya que numerosos estudios han constatado que son un elemento de distracción para el conductor.

La entidad recuerda que no respetar las disposiciones respectivas es “poner la propia vida y las de los otros en peligro. También implica el riesgo de recibir una multa y ser penado con puntos de inaptitud y, en caso de reincidencia, la posibilidad de ver el permiso de conducir suspendido”.

Cifras que alarman

Según la agencia canadiense de estadísticas, en 2015, último año del que se disponen estadísticas, la policía canadiense reportó 72.039 incidentes de conducción con las capacidades mentales y físicas afectadas.

Los casos ligados al consumo de drogas totalizaron 3.000, es decir, el 4 por ciento del total.

Las provincias que presentaron los niveles de infracciones más altos fueron los Territorios del Noroeste, Yukón y Saskatchewan.

Por el contrario, Ontario, Quebec y Manitoba se ubicaron con el menor número de casos.

Saint John’s, en Terranova, se posicionó como el área metropolitana con la mayor cantidad de infracciones, tanto por consumo de drogas como por ingesta de alcohol.

Los jóvenes adultos entre 20 y 24 años de edad presentaron los valores más altos de facultades disminuidas al volante.

Un instante de distracción puede tener consecuencias graves e irreversibles. Foto: iStock.

Fuentes: The Canadian Press, SAAQ, Statistics Canada, archivo de RCI.

Categorías: Sociedad
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