Las reacciones al proyecto de ley sobre la inmigración en Quebec no se dejaron esperar. Entre ellas, sobresale la del gobierno federal de Justin Trudeau que rechazó la propuesta del gobierno de la provincia francófona de aplicar condiciones a los inmigrantes en esa provincia antes de que obtengan el estatus de residentes permanentes.
Otra de los temas que causó preocupación fue el anuncio de la eliminación de 18 000 solicitudes presentadas al Ministro en el marco del Programa de Trabajadores Calificados Regulares antes del 2 de agosto de 2018 y para las cuales aún no haya tomado una decisión de selección, rechazo o rechazo en el momento en que se presentó el proyecto de ley.
¿Qué opciones se presentan para aquellos cuyas solicitudes serán eliminadas?
- Primera opción, la petición: Leonardo Rubio y Karen Caballero lanzaron una petición ciudadana después de saber la semana pasada que su expediente podría ser tirado a la basura si la Asamblea Nacional aprueba el proyecto de ley del Ministro Simon Jolin-Barrette en su forma actual.
Fotos: Facebook.com / Avaaz.org | Montaje: RCI
- Otra de las opciones es legal, nos dice Claudia Molina, abogada especializada en derecho de inmigración y con sede en Montreal:
3. Por su parte, el gobierno de Quebec sugiere a todos aquellos que habían presentado su solicitud al ministerio de la Inmigración de Quebec en el marco del Programa de Trabajadores Calificados Regulares antes del 2 de agosto de 2018 y que no hayan recibido una respuesta de selección, rechazo o rechazo en el momento en que se presentó el proyecto de ley, que vuelvan a presentar una declaración de interés en el programa Arrima y a informarse sobre nuestros otros programas de inmigración.
Recordemos que el jueves 7 de febrero, el gobierno quebequense presentó un proyecto de ley que impondría nuevas condiciones a los extranjeros que vienen a la provincia, incluyendo el lugar donde viven y trabajan.
El proyecto de ley trataría también de asegurar que los inmigrantes aprendan francés e se integren a la sociedad quebequense antes de que puedan obtener la residencia permanente, lo cual es un paso provisional para convertirse en ciudadanos canadienses.
Sin embargo, el poder legal para otorgar la residencia permanente a los recién llegados pertenece al gobierno federal bajo la Ley de Inmigración y Protección de Refugiados, lo que significa que Quebec necesitaría la ayuda de Ottawa para promulgar su plan.
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