Funcionarios canadienses permanecen en alerta máxima mientras continúan los esfuerzos por evacuar a la gente del área debajo de la presa de Bell Falls en el oeste de Quebec.
La peor inundación en el río Rouge provocó una evacuación obligatoria el jueves.
Alrededor de 400 soldados se están desplegando en áreas clave de Ottawa, incluida la Bahía de Constanza, mientras continúa el estado de emergencia. (Krystalle Ramlakhan / CBC)
El agua está pasando rápidamente bajo la presa de 104 años de edad a ritmo alarmante, probando los límites de su estructura y su capacidad para contener el poderoso río.
«Pusimos en marcha algunos equipos que nos permiten seguir el flujo del río», dijo el viernes el portavoz de Hydro-Québec, Francis Labbé.
El personal del servicio público está convencido de que la represa se mantendrá incluso si los niveles de agua aumentan con la lluvia esperada, dijo, pero la tasa de flujo puede aumentar en otro 30 por ciento en los próximos días.
Debido a eso, «no podemos garantizar legal y moralmente que la estructura será capaz de mantener tal presión».
Ottawa declara el estado de urgencia
El río Outaouais rodea una casa en la bahía de Constanza. El pronóstico de aumento de los niveles de agua llevó a la ciudad de Ottawa a declarar el estado de emergencia. El alcalde Jim Watson tomó la decisión el jueves, luego de que Environment Canada anunció una precipitación de 25 a 30 mm para el sábado. Foto Radio Canadá.
Y el fin de semana será difícil no solo para los residentes de Quebec, sino también para los de las provincias de Ontario y Nuevo Brunswick, donde la lluvia y la nieve que se derrite, presagian nuevos flujos.
En Ottawa, la capital canadiense, se ha declarado el estado de emergencia.
Según el director municipal de la ciudad de Ottawa, Steve Kanellakos, el municipio ya no puede mantener los servicios a la población en un nivel óptimo para las próximas semanas. La ciudad, dice, necesita ayuda de niveles más altos de gobierno.
Casi 200 hogares corren el riesgo de ser inundados en Ottawa.
La autopista Trans-Canada ha estado cerrada al tráfico entre Fredericton y Moncton, provincia de Nuevo Brunswick debido a las inundaciones que afectaron a las comunidades a lo largo del río Saint John. Al menos 490 personas tuvieron que abandonar sus hogares debido a las inundaciones. Foto: Radio-Canada / Trevor Lyons
Lluvias y derretimiento de la nieve anunciadas el fin de semana
Según el último informe publicado el viernes por la mañana por Urgence Québec, el número de viviendas inundadas aumentó a 3148, el número de residencias aisladas llegó a 2305 y el de los evacuados aumentó a 1111, datos que no han cambiado desde el jueves noche.
Las lluvias podrían durar todo el día el viernes. Se esperan unos 40 mm de lluvia, o incluso 50 mm en algunos lugares de Quebec.
La lluvia no será el único problema. Las temperaturas alrededor de 10 grados y más acelerarán el derretimiento de la nieve, especialmente en áreas más al norte, donde la cobertura de nieve sigue siendo importante según Environment Canada.
A pesar de las advertencias de los ingenieros de Hydro-Quebec y el ministro de seguridad pública de la provincia, algunas personas se niegan a evacuar los lugares.
RCI con información de Radio Canadá-CBC
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