(Foto: ©iStock/OgnjenO)

Casi la mitad de los canadienses no habla con sus vecinos

Un nuevo estudio muestra que el 45% de los canadienses no ha hablado con su vecino en el último mes, que a seis de cada diez (62%) les gustaría que sus amigos y familiares pasaran más tiempo con ellos y sólo el 14% de los canadienses describiría su vida social como «muy buena». 

Estos son algunos de los resultados de un nuevo estudio que explora la calidad y cantidad de las relaciones humanas en las vidas de los canadienses de hoy, revelando segmentos significativos de la sociedad que buscan beneficios emocionales, sociales y materiales de la conexión con otros. El estudio fue realizado por el instituto de investigación independiente Angus Reid y el grupo de reflexión no partidista sobre la fe, Cardus.

Este estudio clasifica a los canadienses en torno a dos dimensiones clave:

  1. El Aislamiento Social (o el número y frecuencia de las conexiones interpersonales que tiene una persona)
  2. La Soledad (o su satisfacción relativa con la calidad de esas conexiones).

Según los principales hallazgos se puede trazar un retrato del aislamiento y la soledad en Canadá clasificando a los canadienses en los grupos siguientes:

Imagen: ©Angus Reid/Cardus – RCI (adaptación al español)


Algunas otros hallazgos clave del estudio
  • Los Apreciados – aquellos que no sufren ni de aislamiento social ni de soledad – son más propensos a casarse, a tener hijos y a tener ingresos más altos.
  • Los mayores de 55 años – Si bien el nivel de ingresos desempeña un papel importante en la vida de todos los canadienses, las experiencias de los canadienses mayores de 55 años son particularmente dignas de mención. Dentro de este grupo, las personas con ingresos inferiores a 50.000 dólares tienen el doble de probabilidades de ser encontradas en el grupo Solitario que las personas con ingresos de 100.000 dólares o más.
  • Las minorías visibles, los indígenas canadienses, las personas con problemas de movilidad y las personas LGBTQ2 son notablemente más propensas a lidiar con el aislamiento social y la soledad que el promedio de la población general.
  • Las actividades comunitarias, basadas en la fe o no, están correlacionadas con un menor aislamiento de las personas que participan en ellas.
  • La tecnología  – Una gran mayoría de los canadienses que utilizan tecnología como las redes sociales, los mensajes de texto o las videollamadas para mantenerse en contacto con amigos y familiares dicen que aprecian el impacto que ha tenido en su capacidad de mantenerse en contacto.

Cada vez más gente viviendo sola en Canadá

Según las informaciones más recientes del Instituto de Estadísticas de Canadá, vivir solo se está volviendo cada vez más común en el país. El porcentaje de canadienses en hogares unipersonales ha crecido significativamente en los últimos 25 años. Estadísticas Canadá estima que uno de cada cuatro (26%) canadienses mayores de 65 años vive solo.

Además, la proporción total de la población que vive en hogares unipersonales se ha cuadruplicado en las últimas tres generaciones, pasando del 7% en 1951 al 28% en 2016.

Estos resultados coinciden con otros estudios por ejemplo el de una encuesta realizada en 2016 por la American College Health Association sobre un grupo de 44.000 canadienses, todos estudiantes de educación superior, que reveló que dos tercios de ellos declararon sentirse «muy solos» en algún momento de los últimos 12 meses.

(Foto: ©iStock/Alexandra Iakovleva)

Soledad y salud

Hace tiempo que se reconoce que la soledad es mala para la salud mental de una persona, pero una investigación canadiense y otras ene el extranjero están demostrando que también puede ser físicamente dañina.

«Ahora sabemos que no sólo afecta a su calidad de vida, sino también a su duración», dice Ami Rokach, psicóloga de la Universidad de York en Toronto, quien ha estudiado la soledad durante más de 30 años.

En su estudio Surviving and Coping With Loneliness, la investigadora canadiense presenta documentación que justifica su argumento. Según sus investigaciones, la depresión, el deterioro de la salud física y social se pueden asociar con la soledad en diferentes etapas de la vida.

Ami Rokach está convencida que más allá de causar mayores tasas de depresión, ansiedad e irritabilidad, la soledad se está asociando ahora con problemas de salud que pueden acortar la vida, como la presión arterial alta, las enfermedades cardíacas y la obesidad.

Algunos expertos han llegado incluso a argumentar que la soledad durante un período prolongado es más perjudicial para la salud de una persona que fumar 15 cigarrillos al día.

Rokach añade que el estigma asociado a la soledad a menudo impide que las personas que la experimentan intensamente busquen ayuda.

«La gente cree que si admite su soledad, los demás no querrán quiere estar con ellos.»Ami Rokach

Es un problema global. En el Reino Unido, la situación se ha vuelto tan apremiante que el gobierno ha nombrado a una ministra de la soledad para abordar el problema.

En Canadá, varios estudios han hallado que uno de cada cinco canadienses se identifica como solitario y cada vez más canadienses viven solos: el 28% de todos los hogares del país, según cifras recientes de Statistics Canada.

Por otro lado, las tasas más altas de divorcio, la mayor dependencia a la tecnología y la urbanización se han considerado factores que contribuyen a la soledad.Pero independientemente de las razones por las que ocurre, el consenso es que está ocurriendo y los resultados son perjudiciales.

(Foto: ©iStock/FG Trade)

Grupos minoritarios

Volviendo al estudio del instituto Angus Reid, podemos notar que según sus hallazgos, las minorías en la sociedad canadiense tienden a estar sobrerrepresentadas en la categoría «Solitaria/o».

Alrededor de uno de cada seis (16%) canadienses encuestados se identifican como «minorías visibles», es decir, personas cuyos antecedentes étnicos o religiosos los diferencian notablemente de la población mayoritariamente blanca de ascendencia europea. Las minorías visibles están ligeramente sobrerrepresentadas en la categoría Solitarios (el 30% están en esta categoría), en comparación con las que no se identifican como tales (22%).

De manera similar, el 7 por ciento de los encuestados que se identifican como indígenas tienen más probabilidades de pertenecer al grupo Solitario (30 por ciento frente al 23 por ciento de los encuestados no indígenas; véanse los cuadros del índice para más detalles).

Aquellos que son lesbianas, gays, bisexuales, transgénero o dos espíritus (LGBTQ2) son significativamente más propensos a estar en el grupo de Solitarios, y significativamente menos propensos a estar en el grupo de Apreciados.

La discapacidad física también está altamente correlacionada con sentimientos más intensos de aislamiento social y soledad. Casi cuatro de cada diez (38%) de los que tienen una discapacidad física se describen como Solitarios, al igual que más de uno de cada cuatro (27%) que tienen problemas de movilidad que afectan su vida diaria.

Religiosidad, aislamiento y soledad

Según el estudio de Angus Reid, que además coincide con otras conclusiones de la profesora Ami Rokach, los canadienses que son más activos religiosamente son menos propensos a experimentar el aislamiento.

Los que se describieron como Solitarios y los Aislados pero No Solitarios son más propensos que otros grupos a nunca o raramente asistir a los servicios religiosos. Los dos grupos que experimentan los niveles más altos de aislamiento son también los menos propensos a participar en actividades religiosas.

(Foto: ©iStock/South_agency)

Parece obvio, pero las soluciones al aislamiento y la soledad están en la comunidad

La participación en la comunidad es cada vez más importante. Sin embargo, es poco probable que los canadienses sean socialmente activos en sus comunidades geográficas inmediatas. Sólo tres de cada diez (30%) dicen que socializan regularmente con sus vecinos, mientras que sólo uno de cada cinco (18%) dicen que son voluntarios en sus comunidades o que asisten a eventos tales como música en vivo o espectáculos teatrales (21%).

Si la gente se involucra en su comunidad como dice sentirse identificada a ella, la soledad podría desaparecer ya que según las estimaciones bianuales de Estadística Canadá, el sentimiento de pertenencia a la comunidad es muy alto en Canadá en general.

De hecho, las personas de 12 años o más que reportaron un sentimiento fuerte o algo fuerte de pertenecer a su comunidad local alcanzan el 69% de la población canadiense. Las investigaciones muestran una fuerte correlación entre el sentimiento de pertenencia a la comunidad y la salud mental y física.

RCI/The Angus Reid Institute/Estadísticas Canada/Universidad York/CBC News/American College Health Association 
Categorías: Salud, Sociedad
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