El ministro canadiense de la Seguridad Pública, Ralph Goodale, afirma que la crisis de los opioides en Canadá y Estados Unidos es tan grave que fue incluida en una declaración común de los líderes de ambos países durante su encuentro el lunes de esta semana. Ralph Goodale dijo este martes que la crisis se ha propagado a nivel internacional.
Después de su encuentro el lunes en Washington, el presidente estadounidense, Donald Trump y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, publicaron como de costumbre, una declaración común en la que ambos países evocan los grandes temas en los que trabajan y que los preocupan. La crisis de los opioides estaba incluida en esa declaración.
“Puesto que ambos estamos preocupados por el aumento de decesos ligados al consumo de opioides, nuestros países colaborarán para encontrar soluciones comunes que protejan a la población contra el tráfico ilícito de opioides”, dice la declaración en la sección sobre la seguridad en las fronteras.
El ministro Goodale resaltó este martes que este tema preocupa a las autoridades de ambos lados de la frontera y que Canadá trabaja en colaboración con sus aliados para tratar de frenar el tráfico ilícito de opioides.
Altos responsables canadienses y estadounidenses colaboran ya sobre una base regular, dijo Goodale, pero la declaración común del lunes refuerza la necesidad de una verdadera asociación internacional para poner fin a esta calamidad.
Canadá, que se encuentra ahora con Estados Unidos entre los primeros en la lista de países que más consumen opioides en el mundo, está intentado legislar para contrarrestar este problema.
En el mes de diciembre pasado, el gobierno liberal presentó un proyecto de ley que permitirá flexibilizar las reglas para la implantación de centros de inyección supervisada. El gobierno conservadora anterior había agregado varias restricciones que impedían prácticamente la implantación en el país de estos centros que ayudan a los consumidores de drogas.
El proyecto de ley permitirá también a los aduaneros canadienses en el futuro, abrir paquetes más de 30 gramos. Ottawa quiere imponer también nuevas restricciones para la importación de prensas y “encapsuladores”, que son todas máquinas que se utilizan en la fabricación de drogas ilícitas.
RCI/Radio Canadá/Canadian Press
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