Comencemos por la definición del concepto. El poliamor es la práctica o el deseo de vivir más de una relación íntima a la vez con varias personas. Digamos primero que todo, que este tipo de relación puede implicar o no la sexualidad. Digamos también que el poliamor está estrechamente vinculado a una ética, que no existía necesariamente durante las décadas del amor libre en los 60 y los 70.
En otras palabras, se dice del poli-amor que es no monogámico ético o no monogámico responsable, porque se basa en la idea de que se necesita un consentimiento claro de todas las personas implicadas en esa relación.
Se basa entonces en la transparencia, la franqueza, el respeto, la lealtad y la igualdad entre los hombres y las mujeres. Lo cual tampoco era contemplado en principio en las décadas del amor libre. No se trata tampoco del intercambismo o intercambio de parejas
Según Chiara Piazzesi, profesora de Sociología en la Universidad de Quebec en Montreal, UQÀM, la primera versión de la palabra poliamor se le debe al inglés: polyamory. Una palabra que fue inventada y que comenzó a circular en 1990 y que fue aceptada por el diccionario Oxford en 2006, pero en el diccionario francés no ha sido aceptado todavía.
Y la palabra que define lo contrario de los celos y que muy probablemente no existe todavía en español, es la palabra compersión. Que es la alegría que sentimos frente a la felicidad del otro.
Lo que podemos decir es que no todos los humanos estamos todavía bien preparados para ese tipo de relación.
Digamos a título de información suplementaria que en Quebec existe la Asociación Quebequense de los poliamorosos y que en el foro de la asociación hay alrededor de 600 miembros.
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