Una nueva ley en Bolivia permitirá al ejército derribar aviones sospechosos de traficar con cocaína, a pesar de que esta ley no pueda hacerse efectiva en lo inmediato porque el país no dispone de las capacidades en lo relacionado a la cobertura radar.
La ley, interinada por el presidente Evo Morales este martes, exige primero que Bolivia compre e instale los sistemas de radar que le hacen falta en sus fronteras.
Bolivia es el tercer productor de cocaína en el mundo y se ha convertido además, en el lugar de tránsito de predilección para la cocaína parcialmente procesada en Perú, que cuenta con cosechas de coca más importantes.
Brasil, Colombia, Honduras y Venezuela, cuatro países por donde transita la cocaína, adoptaron políticas parecidas. Perú había hecho lo mismo, pero interrumpió su programa.
Responsables de la lucha contra el narcotráfico afirman que diariamente, alrededor de 6 aviones cargados de droga entran a Bolivia pasando por Perú. Según las autoridades, después de haber sido refinada, la coca es transportada por tierra hacia Brasil, Paraguay y Argentina. La mayor parte de esta cocaína es destinada al mercado europeo.
El presidente Evo Morales declaró los periodistas que Bolivia está negociando con otros países para comprar 6 radares, evaluados en 90 millones de dólares, pero no identificó los países.
Paraguay y Argentina no ofrecen ninguna cobertura radar en sus fronteras con Bolivia y no fue posible establecer si Perú cuenta con un sistema funcional en su frontera. Responsables peruanos habían declarado a principios de año que estaban reparando un sistema radar viejo.
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