El gobierno federal debe interrogarse sobre lo que puede hacer para proteger mejor las fuentes periodísticas, afirma el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, después de las revelaciones de espionaje contra periodistas por parte de la Seguridad de Quebec, la policía provincial.
Justin Trudeau declaró que los canadienses pueden estar tranquilos en cuanto a las prácticas vigentes en la Real Policía Montada de Canadá (RCMP-GRC por sus siglas en inglés y francés) y el Servicio Canadiense de Inteligencia y Seguridad (CISC-SCRC).
En conferencia de prensa este jueves al mediodía, Justin Trudeau fue cuestionado sobre la posibilidad que su gobierno revise el artículo 193 del Código criminal, evocado por la Seguridad de Quebec este miércoles para justificar el espionaje de las comunicaciones de 6 periodistas quebequenses en 2013.
Justin Trudeau reveló que se había comunicado con el comisario de la RCMP y los responsables del SCRS con relación a este asunto de espionaje para asegurarse que “ninguna actividad de ese tipo se produzca a nivel federal”.
Recordemos que en el mes de mayo pasado, CBC, la red inglesa de radio y televisión de Radio Canadá, había revelado que 2 periodistas del diario La Presse de Montreal, Joel-Denis Bellavance y Gilles Toupin, habían sido espiados durante 9 días en 2007 por agentes de la RCMP.
Los dos periodistas habían sido vigilados físicamente por agentes de la policía federal, que deseaban descubrir la fuente que les había revelado los detalles de una conversación que implicaba a Adil Charkaoui y un plan para secuestrar un avión.
Después de 9 días, los agentes pidieron una autorización formal al cuartel general de la RCMP, que se la rechazó. La dirección de la policía federal había ordenado que los periodistas no debían ser considerados como sospechosos y precisó que ningún otro trámite parecido debía ser iniciado sin su consentimiento.
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