Una nueva Primera Nación en Canadá

11 octubre 2012
de Leonora Chapman
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Cada día que pasa, hay más y más Indígenas  que se registran como tales  en la provincia de Terranova. No a causa de una  migración, ni de una impresionante tasa de natalidad. Sino debido a que miles de personas están descubriendo, o declarando por primera vez, que son descendientes Mi’kmaw y que ahora serían elegibles no solo para ser miembros de una Primera Nación  creada oficialmente sino  también para obtener los beneficios  que de ella se derivan.  Leonora Chapman con la historia.

Se espera que Terranova, una vez denominada  por un famoso irlandés como el lugar más irlandés  fuera de Irlanda, y el lugar donde los  aborígenes Beothuk fueron esencialmente exterminados, sea la sede más grande de una comunidad de las Primeras Naciones y que pronto podría acoger a más aborígenes auto-identificados que todas las demás provincias del Atlántico canadiense combinadas.

La provincia fue la última en unirse a la Confederación, y debido a que nunca adoptó la Ley sobre las Primeras Naciones, los aborígenes de Terranova y Labrador han estado luchando durante décadas para obtener el reconocimiento del gobierno canadiense. La creación de la Primera Nación Mi’kmaq,  Qalipu,  el año pasado fue  la culminación de esa lucha.

Anciana Mi'kmaq-Wikipedia

Anciana Mi’kmaq-Wikipedia

Según la tradición oral  Mi’kmaw, los Mi’kmaq han ocupado la isla desde tiempos prehistóricos. Pero no hay documentación histórica para apoyar esta afirmación, y algunos historiadores sostienen que los Mi’kmaq emigraron de otras provincias del Atlántico, en algún momento después de que los europeos ya se hubieran asentado en  lo que hoy es Terranova.

Una líder indígena en la costa oeste de Terranova afirma  que el futuro de la incipiente Primera Nación Qalipu podría estar en peligro a causa de una avalancha de solicitudes de ingreso a la comunidad.

 

Liz LaSaga

Liz LaSaga

Liz LaSaga, líder Mikmaq,  dice que cuando se llegó a un acuerdo entre  Qalipu con el gobierno federal, los funcionarios esperaban encontrarse con  alrededor de 11.000 personas que iban a unirse a la comunidad  Mi’kmaq.

Agrega  que la cifra podría llegar a los  65.000 este  mes, ya que se presentaron miles de demandas inesperadas de ascendencia Mi’kmaq.

LaSaga  tiene temor de que el gran volumen de solicitudes reducirán los recursos que los funcionarios federales  están revisando.

Ella también dice que el gobierno federal revisaará  las reivindicaciones de algunas personas.

«Muchos serán objeto de auditoría», declaró a la CBC-radio Canada  Liz LaSaga.

«La gente hace esto porque ahora que logramos reivindicar nuestra identidad, que de repente ahora se nota como algo bueno y, en consecuencia, tendremos recursos que la gente quiere aprovechar.»

Los miembros de la comunidad acreditados como tales  tienen derecho a recibir prestaciones para la salud, financiamiento para la educación y reducción de impuestos.

Sheilagh O'Leary

Sheilagh O’Leary

Sheilagh O’Leary es consejera municipal en la ciudad de San Juan de Terranova.
«Hay algunos que piensan que esto es sólo  una cuestión de dinero,  dice Sheilagh O’Leary, quien creció con identidad irlandesa y es hoy  miembro de la comunidad  Qalipu. «Pero para la mayoría, se trata de recuperar la identidad y entender  de dónde vienes».

Sheilagh  O’Leary se enteró que su madre era francesa Mi’kmaq hace siete años y ella y sus hijos se convirtieron en miembros de la comunidad  Qalipu.

Cuando el gobierno federal anunció en 2007 que la nación Mi’kmaq de Terranova y Labrador sería  elegibles para recibir su estatus bajo la Ley Indígena, la Federación Indígena de Terranova tenía unos 7.800 miembros.

La primera elección de las autoridades que dirigirán la  comunidad Qalipu se llevará a cabo 23 de octubre.

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