Ecos de la guerra civil siria en Canadá

Este mes de marzo marca el comienzo del tercer año de guerra civil en Siria. Tras dos años de violencia, más de 70.000 personas han muerto y más de un millón de sirios tuvo que huir del país hacia el Líbano, Jordania, Turquía e Irak. Otros cuatro millones se vieron obligados a abandonar sus hogares, convirtiéndose en desplazados internos. Esta situación conmueve y moviliza a una parte de la comunidad sirio-canadiense.

Escuche

El pasado fin de semana, cientos de sirio-canadienses participaron en una manifestación en las calles de la mayor ciudad canadiense, Toronto. Entre los participantes se encontraba el doctor Anas al Kassem. El nació en Siria y actualmente trabaja como médico en la provincia de Ontario. Él ha estado viajando constantemente a su país natal, donde ayudó a la instalación de hospitales de campaña en un país desgarrado por una guerra civil.

Cada viaje suyo a Siria es un riesgo para su vida, porque él ha estado dando atención médica y operando a los insurgentes heridos que combaten contra el régimen de Bashar al Assad. Él dice que continuará apoyando desde Canadá la lucha de la insurgencia siria.

Lo que empezó siendo grafiti antigubernamental escrito por adolescentes  en la pequeña ciudad de Daraa en 2011 se ha convertido al presente en una violenta guerra civil.

Millones de personas se han visto obligadas a dejar sus hogares. Según la ONU, en Siria casi una cuarta parte población siria se encuentra refugiada o desplazada. Solamente la semana pasada el número de refugiados aumentó en un 10 %.

Algunas voces de la comunidad sirio-canadiense han señalado que el gobierno canadiense podría hacer más para ayudar a las personas que huyeron de la guerra civil de Siria y se encuentran atrapadas en los campamentos de refugiados en Turquía.

Portavoces del Ministerio canadiense de Ciudadanía e Inmigración señalaron que Canadá no puede sacar a refugiados sirios de los 17 campamentos en Turquía debido a que el gobierno turco no permite que ningún refugiado deje esos campamentos hasta que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) haya tomado una decisión sobre los casos de refugio.

El ministro canadiense de Inmigración, Jason Kenney, visitó dos de los campos de refugiados sirios en suelo turco en enero pasado. Ottawa anunció que está contribuyendo un millón y medio de dólares destinado a la Cruz Roja y el  Movimiento de la Media Luna para ayudar a los refugiados. Este monto se suma a los 8.5 millones de dólares en ayuda ya entregados por el gobierno canadiense.

Categorías: Internacional, Política
Etiquetas: , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.