Francia celebró, hoy, su primer matrimonio entre personas de un mismo sexo. Vincent Autin, de 40 años, y Bruno Boileau, de 30, se casaron en la alcaldía de Montpellier y convirtieron a la República Francesa en el decimocuarto país que aprueba los matrimonios entre homosexuales.
La pareja estuvo acompañada por sus familiares y amigos, personas que apoyan los matrimonios entre personas de un mismo sexo y más de 200 periodistas de diversas partes del mundo que viajaron a cubrir el histórico matrimonio.
La ministra francesa para el Derecho de las Mujeres asistió a la ceremonia en calidad de amiga, de vieja data, de los recién casados. Su colega de la Familia, que era esperada en el matrimonio, se excusó diciendo que se trataba de un evento íntimo.
La alcaldesa de Montpellier, quien presidió la ceremonia, habló de tolerancia haciendo referencia a los desórdenes protagonizados por los grupos que se oponen al matrimonio homosexual. A pesar de la promulgación de la ley que reglamenta este tipo de uniones, varios alcaldes han anunciado que no celebrarán matrimonios entre personas del mismo sexo.
El tema generó un intenso debate en Francia, un país laico en el que, sin embargo, la religión y las doctrinas religiosas sobre el tema siguen teniendo mucho peso social.
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