Ottawa decidió añadir a Chile y Corea del Sur a su lista de países llamados «seguros», un criterio que será utilizado para simplificar las solicitudes de refugio presentadas por ciudadanos de estos países.
Esta designación significa que el gobierno canadiense considera que estos países tienen pocas probabilidades de producir verdaderos refugiados en base a una serie de criterios, incluyendo la existencia de gobiernos democráticos.
Esta lista de países seguros fue creada por el gobierno del conservador Stephen Harper como parte de una reforma del sistema canadiense de refugio, que entró en vigor el año pasado.
El gobierno señaló que el propósito de esta lista es de acelerar el tratamiento de solicitudes de refugio legítimas, eliminando en el proceso las llamadas falsas demandas.
Las solicitudes presentadas por ciudadanos que hacen parte de la lista de países seguros tendrán una audiencia dentro de 45 días y no tienen las mismas posibilidades de apelación que los demás demandantes, en caso de ser rechazados.
El ministro de Inmigración Jason Kenney, informó que las solicitudes provenientes de ciudadanos de países que figuran en esta lista cayeron en un 91 por ciento en comparación con el mismo período durante los últimos seis años.
Sin embargo, esta lista no deja de ser polémica, ya que incluye a países como Hungría, donde muchos creen que las minorías son rutinariamente perseguidas y discriminadas.
Los críticos argumentan que los plazos rápidos establecidos para las solicitudes de ciudadanos de esos países son injustas para los demandantes.
En Chile, las relaciones entre el gobierno y los indígenas mapuche son tensas. Este miércoles, en una audiencia ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos en San José, Costa Rica, dos indígenas mapuches acusaron a Chile de violar sus derechos humanos.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.