Este año, la sociedad se centra en el cáncer de hígado, un cáncer que está aumentando más rápidamente entre los otros tipos de cáncer, y con un mal pronóstico. De los diagnosticados con él, cuatro de cada cinco morirán dentro de cinco años, en comparación con las personas de la misma edad en la población en general que no tiene cáncer.
El cáncer primario de hígado que no se ha diseminado desde otro sitio al órgano es todavía raro. Se esperan cerca de 2.000 nuevos casos de cáncer de hígado este año con cerca de 1.000 muertes por la enfermedad.

«Este es el único cáncer en Canadá en que la mortalidad está aumentando», dice el Dr. Morris Sherman, un especialista del hígado en el Hospital General de Toronto y presidente de la Fundación Canadiense del Hígado.
Los mayores factores de riesgo para el cáncer de hígado son las infecciones por hepatitis C y hepatitis B crónica, pero los virus no son reconocidos como amenazas para la salud, según la Fundación.
Pruebas y tratamientos de las infecciones
El tratamiento para el cáncer de hígado puede incluir la cirugía, la quimioterapia, la radiación y la ablación por radiofrecuencia si se detectan las manchas temprano por ecografía.
La ablación por radiofrecuencia es una operación de un día, es barata en comparación con la quimioterapia y tiene una alta tasa de supervivencia, dice el Dr. David Wong, del Centro de hepatología del Toronto Western Hospital.

«Cuando el cáncer es pequeño, de menos de 2.5 centímetros, es relativamente fácil su cura».
Pero, agrega, la falta de recursos y camas puede retrasar el tratamiento.
«A pesar de que encontramos estos tipos de cáncer, a veces tenemos que esperar y ver cómo crecen mientras los hospitales buscan recursos para tratarlos», dijo Wong.
Para bajar las tasas de mortalidad dice que es importante encontrar y tratar a las personas con hepatitis B o C.
En la actualidad existe una vacuna contra la hepatitis B, pero no para la hepatitis C, que representa alrededor del 30 al 50 por ciento de los casos de cáncer de hígado en América del Norte.
La Sociedad Canadiense del Cáncer también alienta a los proveedores de atención primaria a ofrecer la vacunación o prueba a las personas en riesgo, incluyendo a los recién llegados a Canadá si proceden de zonas del mundo donde las infecciones por hepatitis o el cáncer de hígado son comunes.
Otros factores de riesgo para el cáncer de hígado incluyen:
Consumo excesivo de alcohol.
La diabetes.
Fumar.
En Estados Unidos, los Centros para el Control de Enfermedades llamaron a todos los baby boomers a ser examinados para saber si contrajeron la hepatitis C.
En Canadá, la Agencia de Salud Pública está analizando llevar a cabo una recomendación similar.
La Fundación Canadiense del Hígado también sugiere una prueba de hepatitis C para los nacidos entre 1945 y 1975.
Que es el grupo de edad donde el virus es más prevalente.
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