Los iraníes van a las urnas el viernes para elegir al sucesor del presidente Mahmoud Ahmadinejad.
Hace cuatro años Internet ayudó a los manifestantes a organizar protestas contra su cuestionada victoria.
Y casi sumió al país en una revolución.
Esta vez, canadienses están trabajando para impedir que el gobierno corte las vías de acceso a las redes sociales.
EscucheSina Motalebi sabe de las tácticas sofocantes del régimen.
Hace una década fue el primer blogero iraní en ser arrestado …
Ahora trabaja para la sección persa en la BBC y dice que el control en Irán hoy, es aún peor.

«Usted es un usuario típico de Irán, eso quiere decir que Facebook está bloqueado para usted. Twitter está bloqueado para usted. Algunos correos electrónicos están bloqueados. Hay elementos en el gobierno que ven el contenido generado por los usuarios como actos de espionaje». Motalebi
A medida que se prepara para las elecciones presidenciales de esta semana, el gobierno parece dispuesto a evitar cualquier drama que recuerde las últimas elecciones.
Los sitios de noticias y la red Internet han sido bloqueados.
Pero esta vez gente de todo el mundo está trabajando para tratar de revertir esa situación, y como nunca antes, Canadá está liderando el camino. Un pequeño equipo canadiense trabaja a diario con algo más que los teclados y la convicción.
ASL19 ofrece un software gratis de fabricación canadiense que se utiliza para evitar la censura y proteger la identidad de los iraníes en línea.
Ali Karimzadeh Bangi es el director.

«La comunidad de usuarios de internet en Irán es de tamaño considerable. Es una gran comunidad que desea participar. Ellos quieren comunicarse no solo entre sí sino que también quieren ser capaces de comunicarse con el resto del mundo». Bangi
En estos días previos a las elecciones iraníes el servicio de ASL19 es crucial, en momentos en que el gobierno cerró las redes privadas virtuales que permitían a los iraníes algún anonimato en línea.
Mirando hacia atrás… muchos ven 2009 como una oportunidad perdida… como que se podría haber hecho más para apoyar un movimiento que informó de su propia rebelión usando teléfonos móviles y medios sociales.
Así que esta vez, aun el gobierno de Canadá – que cerró su embajada de Irán el año pasado – ha creado una plataforma en línea para ayudar a los iraníes a mantenerse en contacto y organizarse.
El Ministerio de Asuntos Exteriores está reuniendo a observadores electorales experimentados, analistas y hablantes de farsi para supervisar las elecciones del viernes en Irán, sólo que ninguno de ellos se acercará a las urnas para votar al próximo presidente del país.
En cambio, muchos de ellos se reunirán en la Escuela Munk de Asuntos Globales de la Universidad de Toronto, donde un centro de monitoreo de las elecciones difundirá las elecciones en vivo a partir del viernes, el día que los iraníes van a las urnas para reemplazar al presidente Mahmoud Ahmadinejad.

De acuerdo con funcionarios del gobierno el centro «emitirá» hasta el 21 de junio, día en que una segunda vuelta podría ser necesaria si ninguno los seis candidatos que quedan no obtiene el 50 por ciento de los votos en la primera vuelta.
La transmisión en vivo será accesible a través de Google, Twitter y Facebook, principalmente en farsi. Se incluirá un mapa con diferentes fuentes sobre violaciones de las elecciones basadas al menos en parte, en la información ciudadana que llega desde el propio Irán. El monitoreo de medios, el análisis por farsi hablantes y expertos en elecciones del Instituto Nacional Demócrata completarán la información transmitida en línea para que los iraníes la puedan ver.
La idea, dijeron los funcionarios, es aprovechar esas ventanas raras y limitadas que son las elecciones presidenciales de Irán, que se abren cada cuatro años, para realizar un debate político más amplio.
Los funcionarios creen todavía que los disidentes pueden recuperar su voz, a pesar del daño que causó la represión luego de una campaña electrizante en 2009.
La prueba, es un goteo de imágenes desafiantes que alguien se las arregla para sacarlas para su publicación en línea.
Es ese tipo de determinación que probablemente el gobierno iraní más teme.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.