A la hora de hacer el balance de la temporada para los liberales, el diputado de la circunscripción de Toronto-Centre, Bob Rae, puso fin a su carrera política. Rae había sido hasta hace poco el jefe interino del Partido Liberal de Canadá.
En una rueda de prensa donde se encontraba acompañado por el nuevo jefe del Partido Liberal, Justin Trudeau, Bob Rae, que festejará pronto sus 65 años, explicó que abandonaba la carrera política para consagrarse completamente a su papel de mediador, que él aceptó por cuenta del Reagrupamiento de Concejos de Banda Autóctonos del norte de Ontario, que se encuentran en este momento negociando con el gobierno de la provincia. Un papel que toma muy en serio y quiere cumplir plenamente.
Bob Rae aseguró a los periodista que su decisión no está motivada por cuestiones de ética o de dinero, puesto que él ocupa su sus funciones de mediador como voluntario.
Se trata esencialmente de un problema de tiempo y disponibilidad, precisó Bob Rae, asegurando que no existe absolutamente ningún diferendo entre él y el nuevo jefe del Partido Liberal de Canadá, PLC, Justin Trudeau, a quién reiteró su amistad y confianza.
La salida de Bob Rae constituye una pérdida importante para el PLC, debido a sus 35 años de experiencia política tanto a nivel provincial como federal.
Bob Rae mantuvo al partido unido después del severo revés durante las últimas elecciones federales en la primavera de 2011. Una derrota que relegó el partido, por la primera vez en toda su historia, al rango de segundo partido de oposición en la Cámara de las Comunes.
Bob Rae fue nombrado en efecto, jefe interino del PLC en mayo de 2011, para reemplazar al jefe saliente, Michael Ignatieff, que renunció a su cargo al día siguiente de las elecciones. Justin Trudeau, hijo de difunto primer ministro canadiense Pierre Elliot Trudeau, fue elegido jefe del PLC a principios de este año.
Bob Rae fue elegido diputado neo-demócrata en las elecciones federales parciales de 1978, antes de dar el salto a la política provincial ontariense y de convertirse en el primer Primer ministro neo-demócrata de la provincia de 1990 a 1995.
Enfrentado a una grave crisis económica, su gobierno conoció años difíciles durante ese período mientras que la economía y las finanzas de la provincia se deterioraron profundamente. Su gobierno tuvo que adoptar una serie de medidas impopulares que marcaron este período que los ontarienses evocan bajo el nombre de “Rae days”.
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