Un atentado al carro bomba dejó 18 heridos en las afueras de Beirut, bastión del movimiento chiita pro-sirio del Hezbola, afirman fuentes cercanas a los servicios de seguridad.
Todavía no se han confirmado las informaciones iniciales transmitidas por médicos y que hablan de varios muertos en el lugar del atentado, una zona comercial del barrio Bir al Abed. En ese barrio se encuentran numerosas oficinas del Hezbola.
La tensión aumentó en El Líbano después de la intervención de combatientes del Hezbola en Siria, al lado del ejército del presidente Bachar Al-Assad.
Los combatientes del Hezbola participaron en la reconquista de Kusair, ciudad estratégica cercana a la frontera sirio-libanesa que pasó nuevamente a principios de julio bajo el control del régimen.
Miembros del Hezbola cercaron el lugar, donde confluyeron ambulancias y bomberos. Imágenes presentadas por la televisión pública muestran vehículos en llamas y una espesa columna de humo.
Este es el segundo ataque en la periferia sur de Beirut en lo que va corrido del año. Hasta el momento se ignora quiénes son los responsables de este atentado como de los cohetes que cayeron en la misma zona en el mes de mayo. Tampoco se sabe si responsables del Hezbola se en encontraban en el sector durante el atentado.
El último atentado al carro bomba, en octubre pasado, tenía como blanco a un alto responsable de los servicios secretos. Wissam al Hassan, que murió en el atentado, era miembro del principal partido sunita de oposición, que apoya el levantamiento en Siria.
Sayyed Hassan Nasralah, jefe del Hezbola, juró que su organización seguirá apoyando el régimen del presidente Assad y aunque es consciente que este compromiso militar tendrá un precio, dijo que continuará con su objetivo.
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