Un juez militar estadounidense determinó este martes absolver al soldado Bradley Manning del cargo de complicidad con el enemigo, el cargo más grave contra él, pero lo encontró culpable de espionaje, hurto y fraude informático por haber enviado miles de documentos confidenciales del gobierno estadounidense a la organización WikiLeaks en 2010.
El soldado de 25 años, puede hacer frente a una condena de hasta 136 años de prisión. Manning fue declarado culpable de 19 de los 21 cargos en su contra.
La jueza Denise Lind deliberó unas 16 horas durante tres días antes de anunciar su decisión en un caso que atrajo la atención mundial.
Los partidarios de Bradley Manning lo consideran un héroe. En cambio, el gobierno de Estados Unidos lo considera como un pirata informático y un traidor que busca la atención.
Los alegatos en torno a la sentencia a ser dictada en el caso comenzarán mañana miércoles.
La acusación de colusión con el enemigo era la más grave de los 21 cargos contra el soldado y es castigada con la pena de cadena perpetua sin posibilidad de liberación.
El juicio fue inusual porque el soldado admitió haber enviado a WikiLeaks más de 700.000 informes desde el terreno de las acciones militares, además de cables diplomáticos, así como un video filmado en Irak en 2007 que muestra a un helicóptero del ejército estadounidense ametrallando a un grupo de civiles, incluyendo a un fotógrafo de Reuters y su chofer.
En el video, los pilotos se ríen y llaman a sus blancos civiles como “bastardos muertos”.
Bradley Manning afirmó que envió los documentos para exponer la “sed de sangre” del ejército estadounidense y su desprecio por la vida humana, además de la superchería de la diplomacia.
Manning señaló que había elegido divulgar información que no dañaría a Estados Unidos, y que él quería iniciar un debate sobre la política militar y exterior de su país.
Él no prestó declaraciones durante el juicio.
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