Un panel de economía interna del Senado canadiense se encuentra estudiando un informe de auditoría que examinó las controvertidas declaraciones de gastos de la senadora Pamela Wallin, nombrada al cargo por el primer ministro conservador Stephen Harper en enero de 2009.
Un comité senatorial de tres personas está discutiendo a puertas cerradas ese informe de auditoría después de haber escuchado una presentación de parte de oficiales de la firma de contabilidad Deloitte.
Los auditores dejaron la sala de audiencias sin hacer ninguna declaración a la prensa.
Ese informe de auditoría será presentado al pleno del Comité senatorial permanente de Economía interna, Presupuesto y Administración este lunes, un día antes de que el informe de auditoría sea dado a conocer a la opinión pública.
La senadora Pamela Wallin fue auditada sobre sus declaraciones de gastos que llegan a los 321.000 dólares por concepto de viajes y alojamiento incurridos desde su nombramiento al senado.
La ex presentadora de televisión, que ahora se identifica como senadora independiente, ha devuelto hasta la fecha unos 38. 000 dólares al Senado canadiense. Sin embargo, la radio y televisión pública CBC informó que Wallin podría ser obligada a reembolsar el Estado más de 100.000 dólares.
Junto con ex colegas conservadores Mike Duffy y Patrick Brazeau y ex Liberal Mac Harb, Pamela Wallin hace parte de un puñado de senadores que enfrentan denuncias de haber cobrado indebidamente al erario público decenas de miles de dólares por gastos dudosos.
El escándalo de los gastos de estos senadores ha renovado el pedido de los críticos que piden la reforma e inclusive la abolición del Senado canadiense.
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