El distrito de Rosemont-La Petite Patrie de Montreal se asoció a la Escuela Politécnica de Montreal para hacer frente a un problema cada vez mayor en su territorio: el ruido. Un problema que se agrava, sobre todo durante el verano cuando los ciudadanos abren sus ventanas. Y para luchar contra el ruido, Rosemont-La Petite Patrie adoptó un nuevo reglamento sobre el ruido el mes de enero pasado y ahora, tanto las normas como los niveles de ruido son más estrictos. Las multas relacionadas al ruido aumentaron y para poder actuar correctamente, el distrito utiliza un aparato de medida del ruido nuevo: un sonómetro de última generación.
Y los investigadores de la Escuela Politécnica de Montreal le fabricaron un programa informático que permite medir la intensidad del ruido con más facilidad y más precisión.
Para obtener mediciones que no provoquen la controversia, como podría ser en el caso de las personas ruidosas en los barrios tranquilos hay que seguir un protocolo estricto y claramente establecido.
Este programa desarrollado por la Escuela Politécnica de la Universidad de Montreal, debería permitir al distrito Rosemont-La Petite Patrie de tener, por un lado menos quejas y por otro lado, menos protestas por parte de las personas acusadas o señaladas de hacer demasiado ruido en el barrio. Otro de los beneficios del programa es que acelera además el tratamiento de las quejas hechas por los ciudadanos. Hay que decir para terminar que otros distritos y barrios de la ciudad de Montreal han mostrado su interés por este programa y los nuevos equipos de medición de ruidos que se está probando en este momento en Rosemont-La Petite Patrie.
Tomado del programa de cultura científica de Radio Canadá, Les années lumières.
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