Comer insectos es una delicia que saborean muchos mexicanos desde tiempos inmemoriales. Comer unos deliciosos tacos de chapulines tostados en el Zócalo de Oaxaca es un momento gastronómico que queda grabado en la memoria.
Técnicamente hablando, los deliciosos chapulines mexicanos son saltamontes, de la familia de los celíferos.
En Canadá, unos primos de los chapulines, los grillos, han dado, digamos, un salto mayor en la cultura gastronómica, ya que estos ortópteros, una vez molidos y cocidos, pueden ser la respuesta al hambre en el mundo.
Gracias a los grillos, un equipo de estudiantes de administración de empresas de la Universidad McGill ganó el Premio Hult, de un valor de un millón de dólares.
El desafío consistía en desarrollar un proyecto que permita proveer alimento a las regiones con menos recursos en el planeta.
Ellos desarrollaron un proyecto cuyo objetivo mejorar la disponibilidad de alimentos nutritivos para la población más desfavorecida en el mundo, poniendo a su alcance harina hecha a partir de insectos.
Shobhita Soor, Mohammed Ashour, Jesse Pearlstein, Zev Thompson y Gabe Mott fueron los estudiantes que recibieron ese premio al espíritu empresarial social.
Ese millón de dólares servirá de capital para financiar Aspire Food Group, una organización que producirá alimentos nutritivos a base de insectos, disponibles todo el año para los habitantes de las ciudades más pobres del mundo.
Fue el ex presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, quien hizo la entrega del premio en una ceremonia en Nueva York la noche del lunes en la reunión anual de la Iniciativa Global Clinton.
Mohammed Ashour indicó que se trataba esencialmente de harinas fortificadas con proteínas y hierro obtenidos a partir de insectos.
Los estudiantes señalaron que las proteínas y el hierro son nutrientes que escasean en la dieta de muchas personas en los países llamados en vías de desarrollo, pero que se encuentran en grandes cantidades en los insectos. Según los estudiantes, una libra de grillos tiene un mayor contenido de proteína que una libra de carne de res.
En el mundo, alrededor de dos mil millones de habitantes comen insectos como parte de su dieta. Para el proyecto, el tipo de insecto será elegido en función de las preferencias culinarias locales. Por ejemplo, en México, ellos utilizarán el saltamontes. En Ghana, probablemente será el insecto llamado picudo rojo, que es un gorgojo de gran tamaño, el que acabará convertido en harina alimenticia.
Una vez convertidos en harina, los insectos pueden ser mezclados con variedades locales de harina, ya sea a partir del maíz, yuca, trigo u otro cultivo.
Mohammed Ashour dijo que su equipo llevó a cabo algunas pruebas sobre el sabor de la nueva harina de grillo y los resultados indican que la gente encuentra que la harina de grillo tiene un sabor neutro o incluso un mejor sabor que los productos que se hacen con harina de maíz tradicional.
La Fundación Premio Hult lleva a cabo un concurso anual abierto a equipos de cuatro o cinco estudiantes de colegios y universidades para desarrollar ideas de empresas sociales, que son organizaciones que utilizan estrategias basadas en la economía de mercado para hacer frente a los problemas sociales o ambientales.
El reto de este año, elegido por el propio Clinton, era combatir el hambre en el mundo
Más de 10.000 estudiantes participaron en este concurso y el equipo de la Universidad canadiense McGill, en la ciudad de Montreal fue uno de los seis que llegó a la etapa final.
Ellos presentaron su idea el pasado lunes ante un jurado que incluía figuras como Bill Clinton, el Premio Nobel Muhammad Yunus y Erathrin Cousin, director del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
El millón de dólares fue proporcionado por la familia del multimillonario sueco Bertil Hult , que hizo su fortuna desarrollando la empresa educativa EF Education First , que dirige una serie de instituciones educativas en el mundo.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.