La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, acusaron al ministro de Defensa del gobierno colombiano, Juan Carlos Pinzón, de actuar como un “francotirador” en el proceso de paz entra Bogotá y la guerrilla.
Con estas declaraciones, las FARC destacaron este martes las pocas esperanzas de concluir un nuevo acuerdo parcial en las conversaciones de paz con el gobierno.
“Todavía no hemos llegado” dijo el jefe de la delegación de la guerrilla, Iván Márquez, al ser interrogado acerca de un acuerdo sobre el segundo de los cinco puntos de la agenda de negociaciones que trata sobre la participación de las FARC en la vida política colombiana una vez concluido un acuerdo de paz.
Al concluir la ronda anterior de negociaciones, a fines de septiembre, ambas partes indicaron que un acuerdo sobre el segundo punto ya se encontraba en la “etapa de redacción”.
Iván Márquez acusó al ministro de Defensa colombiano, Juan Carlos Pinzón, de comportarse como un “obstinado francotirador disparando contra la santabárbara, buscando siempre hacer estallar en pedazos los diálogos de La Habana.”
La guerrilla de las FARC también señaló que Pinzón les niega la condición de oposición política y estigmatiza a quienes tienen posiciones diferentes a las del poder.
“Nos da la impresión que el ministro de marras no está hablando en la línea discursiva del gobierno, sino subordinado a la línea anti-paz del enemigo público número uno de la solución política, el ex presidente Álvaro Uribe Vélez”, afirmó la guerrilla en su comunicado.
El ministro de Defensa de Colombia recientemente acusó a las FARC de estar detrás de las acusaciones que llevaron al ex comandante de las fuerzas armadas del presidente, el general Freddy Padilla, a renunciar al cargo de embajador en Austria.
Según el Centro Europeo para la Constitución y los Derechos Humanos (ECCHR), una organización dedicada a la defensa de los derechos humanos, el general Freddy Padilla es “sospechoso de ser penalmente responsable de los extensos crímenes internacionales cometidos contra la población civil, en particular en el contexto de las ejecuciones extrajudiciales en el escándalo de los ‘falsos positivos’”.
Las negociaciones entre el gobierno colombiano y la guerrilla para poner fin a un conflicto armado que dura ya medio siglo comenzaron en noviembre de 2012.
Hasta la fecha se logró un solo acuerdo, en mayo pasado, sobre uno de los cinco puntos de la agenda de trabajo. Ese acuerdo se refiere al tema del desarrollo rural.
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