La rapidez de dos hombres, en la costa noreste de Terranova logró salvar un tiburón de Groenlandia de morir asfixiado por un pedazo grande de piel de alce bloqueada en la garganta.
Derrick Chaulk dijo que estaba conduciendo por una carretera cerca del puerto de Norris Arm North el pasado sábado cuando vio lo que él creía que era una ballena varada.
Cuando Chaulk se acercó a investigar, se dio cuenta de que era un tiburón, de unos 2,5 metros de largo, y que pesaba unos 115 kg.
El animal aún estaba vivo y tenía un gran trozo de piel de alce que sobresalía de su boca.
«El alce tenía toda la piel y medía cerca de 70 centímetros de largo»
Refuerzo para el rescate
Chaulk contó que otro hombre de la localidad, Jeremy Ball llegó a la escena y comenzó a tirar del trozo de alce.
«Un par de tirones más y logramos sacar el pedazo.»
Los dos hombres se propusieron llevar al tiburón al agua.
Ball ató una cuerda alrededor de la cola del tiburón y Chaulk se disponía a empujarlo.

«Él tiró de la cuerda, yo empujé con mi bota», dijo Chaulk «, y entre los dos logramos llevarlo a aguas más profundas.»
Chaulk dijo el tiburón se quedó tendido en unos 30 cm de agua durante unos pocos minutos.
«Entonces, de repente, el agua empezó a salir de sus branquias y comenzó a respirar.»
Un caso raro
Los tiburones de Groenlandia se ven raramente en la costa noreste de Terranova. Son carroñeros y se alimentan de la comida que encuentran en aguas poco profundas. Mientras que su dieta es generalmente el pescado, se los ha encontrado en otras jurisdicciones comiendo los animales que encontraron en el agua, como osos polares y renos.
Chaulk dijo que la gente limpia el intestino de los alces en un banco de tierra y tiran los restos de los animales muertos en el puerto.
Chaulk especula con que el tiburón mordió más de lo que podía masticar.
«Él lo tragó al alce hasta la mitad y ya no pudo escupirlo ni tragarlo totalmente, se atascó y creo que la marea lo trajo a la costa.»
Chaulk contó que después que el tiburón comenzó a respirar otra vez, el animal permaneció en las aguas poco profundas durante unos 30 minutos, luego se dirigió hacia el mar.
«Había algunas personas en la orilla mirando y una vez que tiburón nadó y levantó su cola, y se adentró en aguas profundas, todo el mundo comenzó a aplaudir», dijo chaulk.
«Fue una buena sensación ver el tiburón nadar, sabiendo que le salvaste la vida.»
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