Colombia espera detener los cultivos ilegales de coca en el contexto de las negociaciones de paz con las FARC para resolver el conflicto más antiguo de América Latina, dijo el miércoles Humberto De la Calle, el Jefe de la Delegación del gobierno para estas conversaciones.
Las discusiones entre las autoridades de Bogotá y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se llevan a cabo desde el año pasado en Cuba, garante del proceso de paz. Ellas deben reanudar después de una pausa este jueves para discutir la cuestión del tráfico ilícito.
«Queremos una agricultura sin coca, queremos que nuestros agricultores abandonan definitivamente estos cultivos, que han traído nada más que la violencia, la pobreza y la marginación «, dijo De la Calle, en un rueda de prensa celebrada en el aeropuerto de Bogotá, antes de partir hacia la Habana.
El gobierno acusa a las FARC , fundada en 1964 durante una insurrección campesina , de haberse convertido en un jugador importante en el tráfico de cocaína , lo que desmiente la rebelión marxista , que sigue representando según las autoridades a alrededor de 8.000 combatientes .
«No habrá un final real al conflicto sin abordar a fondo este fenómeno», dijo el negociador del Gobierno, abogando por el establecimiento de los cultivos alternativos a la coca, la planta utilizada para la fabricación de cocaína , y que muchos campesinos la consideran como un medio de supervivencia.
Después de haber llegado a acuerdos parciales sobre la necesidad de la reforma rural y la participación de las FARC en la vida política, los negociadores abordarán además del tema del tráfico de drogas, las cuestiones de compensación para las víctimas y el fin de las hostilidades.
En cincuenta años, el conflicto interno, que tuvo como protagonistas a la guerrilla, los paramilitares y bandas criminales, hizo cientos de miles de muertos y de desaparecidos.
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