Unos 500 vuelos fueron anulados, hoy, en el aeropuerto Lester B. Pearson de la ciudad de Toronto, en Canadá.
Aunque las aeronaves pudieron comenzar a aterrizar desde las 10 de la mañana, las consecuencias de los problemas generados por el frío siguen afectando el terminal aéreo: un tercio de las salidas fue anulado y el 40 por ciento de las llegadas fueron afectadas.
El frío intenso, que afecta esa y otras regiones del país, obligó al cierre parcial del aeropuerto internacional durante la noche.
Esta mañana, a las 8, la temperatura, debido al facto viento, alcanzaba los 38 grados bajo cero, según las autoridades portuarias.
“El frío extremo congela el equipo –como las puertas de los aviones- y se convierte en una situación peligrosa para los empleados”. Autoridades aeroportuarias de Canadá.
Antes de que se diera la suspensión de los aterrizajes, varios pasajeros contaron que tuvieron que esperar varias horas antes poder desembarcar del avión. Todas las puertas de desembarque estaban ocupadas. Además, hubo quejas por las largas esperas en los sitios de reclamo de las maletas.
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