Dennis Rodman, ex jugador estrella de la NBA llegó ayer a Pyongyang con otros ex jugadores retirados del basquetbol estadounidense para participar en un partido de gala en homenaje al líder norcoreano Kim Jong-Un.
La cuarta visita en Corea del Norte del ex jugador estrella de los Bulls de Chicago, que dice no tener la más mínima intención de mezclarse a la política, fue calificada de “chiste cruel” por un parlamentario estadounidense mientras que la administración Obama tomó sus distancias.
Dennis Rodman por su parte, explicó su relación con Kim Jong-Un antes de viajar de Pekín a Pyongyang.
“Todo el mundo dice permanentemente que Corea del Norte es un país verdaderamente comunista, que no tenemos derecho de visitarlo. Todo lo que yo sé es que él es simpático conmigo”. Dennis Rodman
Kim Jong-Un no recibió a Dennis Rodman durante su visita precedente a Corea del Norte, a mediados de diciembre del año pasado. Dicha visita seguía de pocos días la condena a muerte de su tío, Jang Song-Thaek.
Para Elliot Engel, miembro demócrata de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, se trata de un “chiste cruel”. «Hay que tener un mínimo de sentido común antes de sentarse a la mesa de alguien. El pueblo norcoreano sufre y se le propone basquetbol” deploró Engel durante una conferencia de prensa organizada en Nueva York con exiliados norcoreanos, entre los que se encontraba Jo Jinhye, presidente de la Asociación de Ayuda a los Norcoreanos.
Marie Hart, portavoz del Departamento de Estado, dijo que Dennis Rodman no informó a las autoridades estadounidenses sobre su viaje y que la administración no le había confiado ninguna misión. “Nosotros no entramos en contacto con él por su intermedio y Rodman no nos representa”, declaró la portavoz.
David Stern, comisionado de la NBA, disoció su organización de la iniciativa del ex jugador estrella, por intermedio de un comunicado.
Los basquetbolistas estadounidenses jugarán contra un equipo norcoreano el miércoles, día del cumpleaños del líder norcoreano Kim Jong-Un.
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