Soldados rusos tomaron el control de una de las últimas bases militares de la marina ucraniana, este lunes en Feodossia, Crimea, en la que seguían ondeando la bandera de Ucrania.
La base naval del sur de Crimea cayó entre las manos de los soldados rusos, según el teniente del ejército ucraniano Anatoli Mozbovoy. Los soldados rusos atacaron la base con armas automáticas y granadas ensordecedoras, pero los soldados ucranianos presentes, desarmados, no ofrecieron ninguna resistencia.
El ataque de los soldados rusos fue apoyado por helicópteros según Vladislav Seleznyov, portavoz del ejército ucraniano en Crimea. La base albergaba al primer batallón de la marina, una unidad de élite del ejército ucraniano.
Los soldados rusos ocupaban ya una parte de la base desde hace varios días, pero los soldados ucranianos habían conservado no obstante, el control de la armería, del campamento de barracas y de otros edificios.
Por lo menos otras tres instalaciones ucranianas cayeron bajo el control de los rusos en el transcurso de los últimos días. El gobierno ucraniano indicó que su ministerio de Defensa había recibido la orden de redesplegar todos sus soldados basados en Crimea en territorio ucraniano.
La toma de la base de Feodossia completa la anexión de Crimea por Moscú, comenzada el 21 de marzo.
Ni Kiev, ni los países occidentales han reconocido la anexión de esta provincia ucraniana por Rusia.
De hecho, los países occidentales miembros del G7 se reunieron este fin de semana en Holanda, para discutir del expediente ucraniano. El presidente Barack Obama participó en esta cumbre de dos días, cuyo tema principal era la discusión sobre la seguridad nuclear.
Canadá, Estados Unidos, Alemania, Francia, Inglaterra, Japón e Italia se concertaron sobre las sanciones que se deben adoptar contra Rusia en respuesta a su acción en Crimea.
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