El fin del año escolar se acerca a pasos agigantados. Antes del 24 de junio todos los estudiantes de las escuelas primarias, secundarias y universitarios saldrán de vacaciones aquí en la provincia de Quebec y en todo Canadá. Pero antes de estar completamente libres durante todo el verano, en el caso de los y las estudiantes del quinto año de escuela secundaria, se celebra el famoso Baile de graduación, que es la recompensa por terminar exitosamente esta etapa de la educación.
Y al parecer, entre los regalos de graduación que se les ofrecen a las estudiantes que terminan su escuela secundaria se encuentra la cirugía plástica o más precisamente, el aumento del tamaño de los senos y/o de las nalgas. Una tendencia ya bien establecida, sobre todo en Estados Unidos, pero que se propaga a un buen ritmo a través de todo el planeta.
La socióloga Diane Pacom, se pregunta por qué las mujeres están todavía encerradas en esa lógica de la mujer en su corporeidad, prisionera de esos conceptos de belleza que transmiten las jóvenes actrices de cine y televisión de la actualidad.
Aunque no todas. Algunas se han dado como tarea de “deshacer” esa imagen vehiculada de la mujer, como es el caso de la cantante Beyoncé que filmó el video de una canción que se llama Pretty Hurts, donde ella misma dice que hay que parar toda esa tendencia. Aunque en su caso, ella es muy bonita y muy bien hecha ¿Pero por qué la graduación de la secundaria y el baile de graduación han tomado la importancia que tienen hoy en día?
En la década de los 50 y los 60, cuando hicieron su aparición los bailes de graduación, el final de los estudios secundarios significaba la entrada en la vida adulta, mientras que hoy en día los jóvenes terminan con un diploma de estudios secundarios y necesitan todavía otros 5 o 6 años de estudios universitarios. El fenómeno no tiene el mismo sentido que tenía al principio, pero sigue existiendo porque se siente la necesidad de ese rito de pasaje.
Y la cirugía plástica acompaña a ese rito, concluye Diane Pacom, profesora de la Universidad de Ottawa y miembro del Observatorio Joven y Sociedad del Instituto Nacional de Investigación Científica. Las jóvenes se aumentan los senos porque quieren resaltar que después de la secundaria son mujeres y la madre le paga a la hija la cirugía e incluso, algunas veces, la madre y la hija se hacen la cirugía al mismo tiempo.
Y lo alucinante, dice ella, es que son cosas que llenan ese vacío en lo que respecta al símbolo de los ritos de pasaje que de paso se convierte en una orgía de consumo increíble que cuesta extremadamente caro.
Tomado del programa Dessine-moi un dimanche de la radio francesa de Radio Canadá.
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