El presidente de una región del norte de Perú y principal opositor a un millonario proyecto de la transnacional minera estadounidense Newmont Mining fue detenido este miércoles de manera preventiva mientras es investigado por presuntos actos de corrupción, informaron fuentes judiciales peruanas.
El arresto de Gregorio Santos se produce cuatro meses antes de la elección de autoridades locales, en las que el dirigente planeaba buscar su reelección para representar a la región de Cajamarca.
La jueza Mercedes Caballero dictaminó en una audiencia pública que Santos probablemente tenía intenciones de huir del país y así interrumpir la investigación sobre supuestos actos de corrupción cometidos durante sus cuatro años de gestión en Cajamarca.
La magistrada ordenó para Santos 14 meses de prisión preventiva en lugar de los 18 meses pedidos por los fiscales.
Santos, miembro del Partido Comunista Patria Roja y ex jefe de una organización campesina, lideró masivas protestas que obligaron a la minera Newmont a suspender la construcción de su proyecto de oro Conga en 2011.
El fiscal del caso, Walter Delgado, acusó al líder de recibir sobornos de empresas que ganaron once contratos de obras públicas locales de su gobierno.
Santos rechazó las acusaciones y dijo que su presencia en la audiencia pública en Lima era una indicación de que no tenía intenciones de huir del país.
«No estoy huyendo», dijo Santos a la jueza. «Estoy aquí a su disposición y a disposición de la justicia», agregó.
El líder de la movilización contra la minera estadounidense afirmó en varias ocasiones que la investigación en su contra es un acto de persecución política dirigido por el gobierno del presidente Ollanta Humala, que busca eliminarlo de la carrera electoral para facilitar la ejecución de proyectos en el sector minero.
Después de ser escoltado por la policía judicial, un grupo de simpatizantes de Santos protagonizó una protesta ante la Corte por la decisión de la justicia local. Olmedo Auris, un político cercano a Santos, dijo que la defensa apelará la decisión de encarcelarlo.
Santos es el tercer presidente regional en Perú que se encuentra tras las rejas o en prisión preventiva, acusado de presuntos malos manejos de fondos públicos.
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