Un informe de la Gendarmería Real de Canadá reveló que grupos motorizados criminales, como los tristemente famosos Hells Angels, están reclutando habitantes del Gran Norte canadiense para traficar con estupefacientes.
Sin embargo, el mismo informe de la Policía Montada canadiense muestra que mafias del crimen organizado provenientes del Medio Ori ente también están actuando en el Ártico de Canadá atraídas por los elevados precios de las drogas.
Los grupos criminales -señalados por las autoridades- quieren aprovechar la llegada al Gran Norte del país de grupos de jóvenes trabajadores reclutados por las minas de uranio, oro y diamante y por las empresas vinculadas a la construcción del oleoducto.
Todo indica que la llegada de los jóvenes aumentó la demanda de drogas y el precio de las mismas.
El gramo de marihuana se está vendiendo –incluso- a 10 veces el precio que se paga en el sur, ubicándose a 100 dólares. El tráfico de alcohol no se queda atrás y el litro de vodka de contrabando puede llegar a costar 600 dólares en algunas comunidades autóctonas donde ese tipo de bebidas están prohibidas.
A “los buenos negocios” que ven los grupos criminales en el Norte del país, se agrega que muchos de los que se fueron a vivir en la zona son buscados por las autoridades.
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