Des soldats israéliens dans le sud de la bande de Gaza, le 13 août

Tropas israelíes al sur de la Franja de Gaza, el 13 de agosto.
Photo Credit: Mohamad Torokman / Reuters

No hay avance en las negociaciones entre palestinos e israelíes

Las negociaciones en El Cairo para lograr un cese permanente de hostilidades en Gaza no dieron señal de progreso este lunes. Tanto israelíes como y palestinos se empeñaban en mantener posiciones divergentes, a pocas horas antes de la conclusión de una tregua de cinco días.

Ese alto el fuego expira a las 2100 GMT. Una fuente palestina señaló que los mediadores de Egipto estaban haciendo «un gran esfuerzo para alcanzar un acuerdo en las próximas horas».

La ministra israelí de Justicia, Tzipi Livni, advirtió sobre la posibilidad de nuevos enfrentamientos, señalando que las tropas israelíes abrirán fuego sólo si son atacadas por la resistencia palestina.

«Si nos disparan, responderemos», dijo Livni, miembro del gabinete de seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu.

Las autoridades palestinas indicaron que la cifra de muertos en Gaza se elevaba a 2.016, en su gran mayoría civiles que habitaban en el pequeño pero densamente poblado enclave costero de Gaza, cuyos habitantes no tienen a dónde escapar. También murieron 64 soldados y tres civiles israelíes.

El domingo, un responsable palestino dijo que la posición negociadora de Israel, tal como fue presentada por los mediadores egipcios, era un «retroceso frente a lo que ya se había logrado y que las conversaciones siguen estancadas».

El responsable palestino que pidió el anonimato señaló que Israel endureció su postura, presentado demandas «imposibles», particularmente en aspectos de seguridad. Añadió que los palestinos estudiarán la situación y darán su respuesta este lunes.

«Estamos decididos a conseguir las demandas de nuestro pueblo y lo principal es terminar con la agresión, lanzar el proceso de reconstrucción y levantar el bloqueo impuesto por Israel sobre la franja de Gaza», dijo el responsable palestino.

Netanyahu advirtió este domingo que cualquier acuerdo debía satisfacer primero las demandas de seguridad de Israel y advirtió a Hamas que sufriría «duros ataques» si reanudaba las hostilidades.

Como parte de cualquier acuerdo duradero, la organización Hamas quiere que se construya un puerto en Gaza y la reapertura de un aeropuerto destruido en conflictos previos.

Israel, que lanzó una desproporcionada ofensiva contra Gaza el 8 de julio con el argumento de poner fin a los disparos de cohetes de Hamas a lo largo de la frontera, mostró un escaso interés en ofrecer concesiones a los palestinos, exigiendo más bien el desarme de la resistencia palestina en el enclave de 1,8 millones de personas.

La organización Hamas declaró que renunciar a las armas no es una opción.

El bombardeo israelí de Gaza, que ha provocado una masiva destrucción de infraestructuras y viviendas, tiene apoyo entre la opinión pública en Israel. Sin embargo, a nivel internacional, esa desmedida ofensiva del gobierno israelí causó una serie de manifestaciones de rechazo y condena.

Por su lado, Naciones Unidas señaló que unas 425.000 personas en Gaza fueron desplazadas a causa del conflicto.

Categorías: Internacional, Política
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