Dos influyentes ministros del gobierno israelí sumaron sus voces al concierto de críticas internacionales provocado por la apropiación de 400 hectáreas de tierra palestinas en Cisjordania por Israel.
El ministro de Finanzas, Yair Lapid y su colega de la Justicia, Tzipi Livni criticaron fuertemente la anexión de esas 400 hectáreas por el gobierno, alrededor del bloque de colonias de Gush Etzion, cerca de Belén. Este gesto abre todavía más la vía de la colonización de este sector que pertenecía a los palestinos.
Esta decisión “es nociva para el Estado de Israel”, dijo el ministro de Finanzas Yair Lapid.
“Conservar el apoyo de la comunidad internacional era ya difícil, entonces ¿qué urgencia había en provocar una nueva crisis con Estados Unidos y el resto del mundo? Yair Lapid, ministro israelí de Finanzas.
“Nosotros necesitamos una conducta política más reflexionada para no crear disputas superfluas con Estados Unidos y la comunidad internacional”, agregó el ministro Yair Lapid.
Esta porción de tierra anexada por Israel se sitúa en el sector donde tres jóvenes israelíes fueron secuestrados y asesinados en el mes de junio pasado. Un incidente que degeneró en una guerra abierta entre el Estado de Israel y el Hamas en la Franja de Gaza, en julio y agosto.
La apropiación por Israel de este sector es una de las más importantes anexiones de territorio en Cisjordania desde la década de los 80, según la organización La Paz ahora.
Así como su colega de Finanzas, la ministra israelí de Justicia Tzipi Livni, considera que este gesto “debilita a Israel y pone en peligro su seguridad”.
La ministra, que dirige el partido Ha Tnouah (centro) y que está encargada de las negociaciones con los palestinos, también expresó el temor de que esta decisión perjudique todavía más las relaciones ya tensas entre Israel y Estados Unidos.
Entre los partidarios de la colonización en el seno de gobierno, el ministro de Economía, Naftali Bennett, jefe del partido religioso “El hogar judío” defiende esta nueva toma de posesión de tierras palestinas.
“Hace 120 años que el mundo se opone a que nosotros construyamos. Nosotros seguiremos haciéndolo”, dijo el ministro Naftali Bennett. “El Hamas asesina, nosotros construimos” agregó, haciendo alusión al asesinato de tres jóvenes israelíes en ese sector.
El adueñamiento de las 400 hectáreas de tierra en Cisjordania al término de 6 semanas de guerra contra el Hamas provocó vigorosas críticas internacionales.
Estados Unidos, Francia, Egipto y Naciones Unidas, entre otros, se oponen a esta decisión de Israel.
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