Christianne Boudreau es la madre del joven Damian Clermont, de la provincia de Alberta, muerto en combate en diciembre del año pasado o enero del presente año en Siria, después de haberse unido a los combatientes del Estado Islámico (EI), para luchar contra el régimen de Bachar El Assad.
Christianne Boudreau desea contrarrestar la radicalización de los jóvenes canadienses convertidos al Islam, y para lograrlo decidió fundar un organismo que reúna a las familias, todavía desorientadas por el activismo extremista de sus hijos.
El objetivo de este organismo, a la imagen de otro existente en Alemania, es de comprender mejor el fenómeno y actuar contra la radicalización antes que sea demasiado tarde. La idea es tratar de “desprogramar” a los jóvenes yihadistas canadiense antes que decidan salir del país.
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