La líder opositora venezolana María Corina Machado fue acusada de conspiración -por la justicia de su país- debido a un supuesto plan de asesinato contra el presidente Nicolás Maduro.
Si llegase a ser declarada culpable, la ex diputada podría ser condenada a una pena de prisión que oscilaría entre 8 y 16 años.
Según la justicia venezolana, Machado habría estado vinculada a un plan que tenía como propósito perturbar la paz de Venezuela.
Machado, al igual que el otro dirigente opositor en problemas con la justicia, Leopoldo López, son considerados como los líderes de una gran parte de los movimientos de protesta contra el gobierno del presidente Maduro.
Para los opositores, y particularmente para la ex diputada Machado, la acusación de conspiración es “una cortina de humo para esconder los problemas económicos y de desabastecimiento que vive el país”.
Las acusaciones contra María Corina Machado, presentadas por el Ministerio Público –el ente acusador de Venezuela- están basadas en las normas legales vigentes según las cuales conspirar contra el país se convierte en un hecho punible.
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