La justicia de Bolivia aceptó investigar a una diputada de oposición que se negó a saludar al presidente Evo Morales durante un acto oficial.
La investigación sería por los presuntos delitos de racismo y discriminación y afecta a la diputada Norma Piérola del Partido Demócrata Cristiano.
La opositora aseguró que se trata de una “persecución política” y que eso lo demuestra, según ella, el hecho de que la denuncia fue aceptada por la Fiscalía Boliviana una hora después de haber sido presentada.
El viceministerio de Descolonización fue el que actuó como denunciante ante la justicia y justificó su actuación diciendo que todo lo que hace la diputada, por ser figura pública y estar en posición de autoridad “es visto por la ciudadanía”.
La diputada también se defendió diciendo que “dar la mano a una persona es un símbolo de amistad, de simpatía y de afecto” y que ella no sentía eso hacia el presidente debido a que –según ella- “está destruyendo la incipiente democracia del país”.
El presidente Morales, por su parte, dijo que respetaba la actitud de la diputada debido a que así es su carácter.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.