Una encuesta de salud mental sugiere que la juventud está sufriendo un problema creciente de estrés. Para una generación criada en la idea de que el estrés es bueno y que la multitarea es la norma, nuevos indicios muestran que esas ideas están produciendo un efecto negativo. Un extenso estudio en Ontario ha encontrado un aumento en el número de jóvenes que sienten que están sufriendo psicológicamente. Y muchos de ellos yendo tan lejos como contemplando quitarse la vida.
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En una encuesta de adultos de 18 años y más en Ontario, el 2,2 por ciento dijo que había pensado suicidarse en años anteriores, según el informe del Centro de Adicciones y Salud Mental (CAMH). Es la primera vez que el hospital incluyó una pregunta específica sobre el suicidio en su tradicional encuesta anual.
La autopercepción sobre la mala salud mental aumentó de 4,7 por ciento en 2003 al 7,1 por ciento en 2013. El aumento se observó entre los de 18 a 29 años, y fue de tres por ciento en 2009 al 12 por ciento el año pasado.
De 33 años, Victoria Miller ha sufrido de problemas de salud mental desde que era una adolescente. Finalmente se le diagnosticó trastorno bipolar hace seis años. Por fuera parecía capaz, feliz. En el interior …
Podría pasar días enteros en la cama y no reconocer ni ser capaz de admitir a la gente lo que realmente me estaba pasando.
Dice que se ha preguntado muchas veces cómo continuar viviendo de esa manera y en otras ocasiones, le asaltaban otros pensamientos.
Esos pensamientos eran del tipo qué sería si terminara con mi vida.
Según una nueva investigación del Centro de Ontario para la Adicción y Salud Mental, CAMH, Victoria Miller es parte de una tendencia que va en aumento.
Basada en una encuesta con tres mil adultos mayores de dieciocho, demuestra que uno de cada veinte adultos jóvenes ha contemplado el suicidio.
La gente nos está diciendo que sufre, que está teniendo problemas, que está encontrando difícil la vida.
El científico principal del CAMH, el Dr. Robert Mann dice que ha habido una cuadruplicación en los últimos cuatro o cinco años en el número de adultos jóvenes que dicen que tienen una mala salud mental, es decir, de 2.9% en 2009 a 12.1% en 2013.
Y el uso de la marihuana se ha duplicado casi en los últimos 25 años, aunque el informe no indica si eso es un síntoma o una causa de enfermedad mental.
La mayoría de nosotros podría pensar que la edad joven adulta es la del mejor tiempo de su vida, pero los datos nos están diciendo que algo muy diferente está sucediendo.
El Dr. Mann cree que los factores económicos y un mundo estresante más complejo pueden estar contribuyendo a eso. Advierte que la investigación del CAMH muestra que el problema comienza temprano, que los estudiantes de secundaria tienen niveles muy altos de estrés psicológico.
Las causas de los suicidios no se conocen bien, pero la pérdida de un ser querido, la pérdida de un trabajo, problemas psiquiátricos y el uso de sustancias tales como el consumo excesivo de alcohol son todos factores, dijo Mann.
Victoria Miller lo relaciona con lo que ella describe como un creciente desapego social de muchos adultos jóvenes.
Todos nos aislamos y nos sentamos sobre nuestros teléfonos y detrás de nuestras computadoras y no salimos ni hablamos con la gente.
El informe de 2013 se basa en las respuestas de 3.021 adultos mayores de 18 años de todo Ontario. La adicción y la encuesta de salud mental se llevaron a cabo por primera vez en 1977.
Los resultados probablemente se pueden generalizar a través de Canadá, dicen los investigadores.
Por ejemplo, la encuesta 2002 de Estadísticas Canadá sobre Salud Mental y Bienestar sugirió que 3,6 por ciento de los adultos mayores de 15 años dijeron que habían pensado en el suicidio en los 12 meses anteriores.
¿Existe un lado positivo? Victoria Miller y el Dr. Mann dicen que el hecho de que más jóvenes adultos reconocen tener una mala salud mental, puede reflejar una creciente apertura y disposición para hablar sobre temas de salud mental. Ambos coinciden que es una buena cosa.
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