Encarcelado en El Cairo, el periodista canadiense Mohamed Fahmy pidió en las ondas de CBC, la red inglesa de Radio Canadá, la ayuda urgente del Primer ministro de Canadá, Stephen Harper.
Detenido en diciembre de 2013 con dos colegas mientras trabajaba para la red de información Al Yazira, el periodista fue condenado en junio a 7 años de cárcel por la justicia egipcia. Fahmy está acusado de ser una amenaza para la seguridad del país y de ser partidario de los Hermanos Musulmanes, una organización terrorista, según el nuevo gobierno egipcio.
En noviembre, Mohamed Fahmy apeló la sentencia y debería ser escuchado el primero de enero, pero él espera una liberación antes de esa fecha.
“Ya estamos en la línea de llegada. La apelación será recibida dentro de dos semanas y yo necesito inmediatamente esa llamada telefónica del gobierno canadiense”, dijo Fahmy en una entrevista exclusiva con el programa The Fifth State.
En noviembre, el presidente egipcio Abdel Fattah Al-Sissi decretó una ley que le confiere poderes más importantes para deportar a los extranjeros encarcelados en Egipto. Él se había negado en el pasado a intervenir en los asuntos judiciales.
A mediados de diciembre, los abogados del periodista escribieron al Primer ministro de Canadá para que actuara para liberar a un ciudadano canadiense, pero sienten que “hay un silencio oficial y poca presión”.
Canadá, dicen los abogados de Mohamed Fahmy, tiene una ocasión histórica de poner fin a una violación continua de los derechos de uno de sus ciudadanos por las autoridades egipcias.
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