Según algunos expertos en educación y en diversas áreas, entrar en un aula de clases en el año 2015 equivale a entrar en el túnel del tiempo pues la metodología de enseñanza que utilizamos hoy en día es comparable a los métodos utilizados en la antigüedad. Y hay algunos que aseguran que el modelo actual basado en la estandarización de los alumnos, como si todos tuvieran las mismas capacidades e intereses, está absolutamente perimido.
El acceso a la tecnología ha traído la inclusión en las aulas de tabletas y computadoras personales entre otros, pero todavía la base de esta práctica educativa sigue siendo en gran parte, libros de texto, lápices, bolígrafos y fotocopias. Y si bien se han registrado algunos cambios, la esencia de la educación de hoy en día sigue utilizando el currículo desarrollado hace ya muchísimo tiempo, lo que impide estar a tono con lo que se vive en la actualidad. Según el pedagogo Marc Prensky, “el mundo necesita un nuevo currículo, repensando el currículo del siglo XIX”. Prensky asegura que la mayor parte de los productos que existen en la actualidad para la educación son solo meras ayudas para enseñar el currículo existente, y que es necesario enseñar mejor lo que se está enseñando hoy. Para este especialista, lo que se requiere ahora es todo un nuevo núcleo de asignaturas que se concentren en las habilidades que equiparán a los estudiantes de hoy para el mundo laboral de mañana.
iStockPhoto.com
Y quizás el problema más grande es lograr cambiar radicalmente los métodos pedagógicos arcaicos pues, los padres de hoy, no aceptan que se experimente con sus hijos para implementar nuevos proyectos sin saber a ciencia cierta el resultado en esas criaturas. Sin embargo, Prensky opina que no queda otra opción; según él, “estamos viviendo en una era de cambio acelerado y hay que experimentar y encontrar lo que funciona”.
Dentro de los proyectos actuales para el cambio de paradigma de la enseñanza tradicional existe un proyecto llamado “El aula Invertida”. En el sistema tradicional de educación, los estudiantes van a la escuela y reciben el contenido impartido por el docente y al volver a casa, tienen que leer, estudiar y resolver problemas de toda índole. En el caso del Aula Invertida, los alumnos estudian los conceptos por sí mismos con videos educativos, podcast, y comunidades en línea. Y cuando vuelven a clase, el tiempo se utiliza para la discusión, la resolución de problemas, la explicación de las dudas y tareas más creativas que requieren la presencia de un educador. Esta práctica puede llevarse a cabo individualmente o en grupo y de esta manera, marcar diferentes ritmos para cada alumno según sus capacidades y así mejorar el ambiente de trabajo en el aula gracias al rol activo del participante.
Mohammed Telbany, director del departamento de TI de una escuela en Sudbury, Inglaterra, ha estado experimentando con el Aula Invertida y lo más llamativo es que los profesores cambian de rol alejándose de sus prácticas habituales y transformándose en facilitadores para ayudar a los niños a que hagan cosas. La mayor sorpresa es que se observó que los niños pueden alcanzar la excelencia por sí solos, con una mínima intervención de parte de los adultos. Este sistema sería de suma utilidad en los países en vías de desarrollo pues hay una enormidad de niños que no pueden ir a la escuela. Y con una metodología de estas características y la pequeña intervención de los adultos se podría estar asegurando la educación a más de 57 millones de niños, que hoy por hoy, no la tienen.
Si bien el Aula Invertida no es la única alternativa para mejorar la experiencia enseñanza-aprendizaje, los estudios que la avalan dan a entender que podría ser una muy buena opción. Además, esta idea de invertir los métodos tradicionales de enseñanza enviando instrucciones en línea fuera del salón de clase y usando la escuela como el lugar para hacer la tarea- está ganando popularidad alrededor del mundo.
Independientemente de los buenos resultados de estas prácticas, que lograron llamar la atención del Departamento de educación de Estados Unidos, quien está invirtiendo 3 millones de dólares para medir la efectividad del método, el cambio radical que se impone es justamente la actualización del currículo educativo. Ya sea con el Aula Invertida o con otras propuestas pedagógicas, la base de la trasformación para una mejor enseñanza es justamente lograr actualizar los contenidos para la educación, y mantenerlos acordes a los tiempos que vivimos.
Fuente: BBC. Agencias
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.