El ministerio de Finanzas del gobierno conservador del primer ministro Stephen Harper, anunció anoche que vendió las últimas acciones que le quedaban de su participación en el plan de rescate financiero de la compañía General Motors, GM. El gobierno vendió alrededor 73.4 millones de acciones a la firma Golman, Sachs & Co.
La acción de GM cerró ayer el mercado bursátil a $36.66 la unidad. Esta venta podría reportarle al gobierno más de 3.300 millones de dólares. Lo que se ignora es si el dinero de esta venta se sumará a los otros montos en previsión del próximo presupuesto federal que debería ser presentado en el transcurso del presente mes.
Canadá era el último gobierno norteamericano en seguir teniendo en su posesión acciones adquiridas en 2009 para ayudar al fabricante de automóviles estadounidense a evitar la quiebra.
En un comunicado, el ministro de Finanzas Joe Oliver, afirmó que esta venta significa que GM es de nuevo una propiedad privada y que los contribuyentes canadienses no están más expuestos a las fluctuaciones del mercado.
Joe Oliver dijo que la inversión era temporal y que el gobierno conservador “nunca creyó que debía ser accionista de una sociedad del sector privado por un tiempo indefinido”.
La venta se hizo en un momento en que el gobierno federal busca los medios de respetar su promesa electoral de reequilibrar el presupuesto antes de las elecciones, mientras que hace frente a las dificultades provocadas por la caída internacional del precio del petróleo.
El monto de la venta no ha sido revelado todavía, pero el ministro de Finanzas indicó que “los detalles se harán públicos cuando la Corporación de Inversiones de Canadá la declare a los organismos de reglamentación de valores mobiliarios de Canadá y de Estados Unidos en el transcurso de los próximos días”.
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