De paso en la ciudad de Vancouver, el primer ministro canadiense Stephen Harper reiteró su promesa de restablecer el equilibrio presupuestario este año, cueste lo que cueste y rechazó la posibilidad de adoptar un plan de reactivación de la economía canadiense, que fue maltratada en los últimos meses por la caída del precio del petróleo.
El primer ministro afirma que no sería viable a largo plazo lanzar un plan de reactivación económica que empujaría al país a un déficit presupuestario, mientras que la economía canadiense comienza apenas a reactivarse.
El afirmó que el gobierno inyectará “una buena suma en la economía” este año por intermedio de medidas como el aumento de las inversiones en infraestructuras o importantes reducciones de impuestos para las familias.
El primer ministro y sus ministros han repetido en los últimos meses que iban a respetar su compromiso a pesar de las dificultades del sector petrolero canadiense.
El presupuesto federal será presentado el 21 de abril próximo y será el último antes de las elecciones federales en el mes de octubre.
El gobierno conservador de Stephen Harper anunció este lunes que vendía 73.4 millones de acciones que tenía de la empresa General Motors, GM. Si nos basamos en el valor de la acción de GM al cierre del mercado bursátil el lunes pasado, la transacción le reportaría 3.300 millones de dólares al gobierno.
Algunos observadores y opositores se preguntan si el gobierno conservador retardó la presentación del presupuesto a propósito para tener en cuenta el monto de esta venta y lograr, tal como prometido, equilibrar el presupuesto.
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