La provincia de Ontario se apresta a aprobar este martes una legislación que incrementa las multas y penalidades para los automovilistas que envíen mensajes de texto, correo electrónico o manipulen un teléfono móvil, a un máximo de 1.000 dólares y la quita de 3 puntos.
La utilización de dispositivos electrónicos que no cuenten con el sistema de manos libres mientras se conduce un automóvil está prohibida desde 2009, con la sola excepción de las llamadas al número 911 de emergencias.
La legislación actual fija las multas entre 60 y 500 dólares, rangos que podrían subir a 300 y 1.000 dólares respectivamente en la nueva norma.
La policía provincial de Ontario afirma que los conductores que se distraen por usar un dispositivo electrónico se han convertido en la primera causa de muerte en las autovías, sobrepasando a los decesos provocados por conductores que manejan bajo los efectos de sustancias prohibidas o a los que resultan de accidentes producidos por exceso de velocidad.
Un relevamiento llevado a cabo en 2014 por el Centro de Adicciones y Salud Mental estableció que un tercio de los jóvenes entre 17 y 18 años, que cuentan con licencia de conducir, admite haber enviado un mensaje de texto mientras conducía.
El gobierno afirma que los automovilistas que se distraen por el uso de un teléfono móvil tienen cuatro veces más posibilidades de involucrarse en un accidente.
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