Un policía fue muerto y otro resultó herido el lunes por la noche en la ciudad de Edmonton, Alberta, en el transcurso de una operación que en principio parecía rutinaria.
Algunas horas después del hecho el jefe de la policía local, Rod Knecht, identificó al efectivo fallecido como el alguacil Daniel Woodall, que se desempeñaba en la fuerza desde hacía 8 años.
Por su parte, el agente herido es el sargento Jason Harley, que fue alcanzado por un disparo en la parte baja de su espalda, pero su vida no corre riesgo y los médicos confían en que se repondrá de sus heridas sin secuelas mayores.
Woodal, de 35 años de edad, originario de Gran Bretaña, estaba casado y era padre de dos hijos. Se desempeñaba en una escuadra que se dedicaba a combatir los crímenes de odio. En momentos del ataque, se aprestaba a hacer efectivo un mandato de arresto por acoso criminal.
El jefe policial no dio información sobre el autor de los disparos. De todos modos, la fuerza aclaró que no busca a ningún sospechoso.
Se trata del segundo miembro de la policía que muere víctima de disparos de arma de fuego en la región de Edmonton desde el inicio del año. En enero último, el alguacil David Wynn, de 42 años de edad, integrante de la Real Policía Montada Canadiense, fue ultimado a pocos kilómetros al norte de la ciudad, cuando intentó interceptar al conductor de un vehículo robado.
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