En la crónica dominical de esta semana continuamos con nuestra serie de tres reportajes sobre la sangre. La sangre que salva y la sangre que cura. La semana pasada hablamos del descubrimiento de los grupos sanguíneos que solucionó el problema de la incompatibilidad de las transfusiones.
EscucheHoy vamos a hablar de los procedimientos de conservación de la sangre, con el Dr. Gilles Delage, médico microbiólogo e infectólogo, especialista en microbiología médica y vicepresidente en Asuntos médicos y Microbiología en Hema Quebec. La importancia de este procedimiento era fundamental para poder conservar la sangre hasta el momento en que un paciente la necesitara.
En otras palabras, a partir del momento en que las transfusiones fueron seguras en términos de reacción inmunológicas, se presentó el problema de su conservación, porque cuando una persona había hecho una donación de sangre, se tenía que hacer la transfusión inmediatamente porque si no, la sangre se coagulaba. La solución que se encontró en ese momento fue de hacer la transfusión de brazo a brazo, lo cual no era nada práctico, dice el Dr. Gilles Delage.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.